El lamento de la Atención Primaria ante el plan de 'gripalizar' la covid: «Es muy precipitado»

Un sistema para vigilar la COVID-19 como la gripe común en la que la notificación exhaustiva de casos, como se venía haciendo hasta ahora, de paso a una red de médicos centinelas, como se hace con las enfermedades estacionales.

De entrada, el plan del Ejecutivo, desvelado por el diario El País y del cual no se conoce fecha exacta de aplicación, no acaba de convencer a una parte significativa de la Atención Primaria, que seguirá siendo la primera trinchera desde la que se enfrente al virus.

«Es muy precipitado tomar ahora esta decisión en un momento en el que todavía no hemos llegado al pico más alto de contagios por la COVID-19», razona Lorenzo Armenteros, médico de familia y portavoz de la Sociedad Española de Médicos Generales y de Familia (SEMG).

Minimizar el problema

El nuevo sistema para hacer frente a la pandemia de la COVID-19 sigue los parámetros que lleva años utilizándose contra la gripe, como parte de una estrategia que se llevaría preparando desde el verano de 2020.

No es el momento: este tipo de decisiones hay que tomarlas en calmaLorenzo Armenteros, portavoz de la Sociedad Española de Médicos Generales y de Familia (SEMG)

«Da la sensación de que es un intento de minimizar el problema, porque si no sabemos el número total de datos, desconoceremos, por tanto, la magnitud del mismo. Posiblemente, la COVID-19 evolucione a lo que los epidemiólogos llaman una enfermedad estacional o comunitaria, pero desde luego, no es el momento. La gente sigue siendo ingresada en los hospitales en un gran número y este tipo de decisiones hay que tomarlas en un momento de calma y no en este contexto», añade Armenteros.

Médicos centinela

Para lograrlo, se recurrirá a un enjambre de 'médicos centinela' que serán los encargados de seguir y notificar los casos activos que sirvan de representación de la situación. «En la red centinela se usan médicos que captan casos posibles de una determinada enfermedad, pero que son datos estimativos. En una situación de pandemia los centinelas serian demasiado pocos o nunca darían la magnitud real del problema. Basarnos en ellos es ocultar la magnitud del problema».

El nuevo sistema tampoco cuenta con el beneplácito actual de la OMS. Hans Kluge, director del organismo para Europa también ha señalado que es pronto para empezar a tratar el coronavirus como una enfermedad endémica –como ocurre con la gripe– y ha insistido en que la prioridad ahora es proteger a los grupos más vulnerables y al personal sanitario.

Es pronto para traspasar las medidas de control a los ciudadanosLorenzo Armenteros, portavoz de la Sociedad Española de Médicos Generales y de Familia (SEMG)

En este sentido, el portavoz de la SEMG alerta por no cargar sobre los hombros de la población el control del problema: «Considero que es demasiado pronto que todo se traspase a la población, siendo los ciudadanos quienes carguen con las medidas de control y progresión de la enfermedad, en un intento de inhibirse ante la gravedad de la situación», finaliza.

Una lanza a favor

Sin embargo, tal y como viene sucediendo demasiado habitualmente con esta pandemia, no existe una unanimidad en torno a este plan.

'El Debate' también ha consultado con el doctor Albert Planes, director de Actualización en Medicina de Familia (AMF), cuyo enfoque editorial pasa por empezar a preparar la transición hacia el fin de la excepcionalidad, lo que supone en la práctica no ver con malos ojos el sistema propuesto por el Gobierno

«El virus no va a desaparecer. Convivirá con nosotros muchos años y pasará a ser un virus más de los que sufrimos habitualmente.  Ómicron ha provocado una situación de mayor equilibrio, donde se infecta con mayor rapidez, pero con menor gravedad que otras olas», ha contextualizado.

La AMF aboga por recuperar la vieja normalidad cuanto antes y centrar todos los esfuerzos en las personas vulnerables, especialmente mayores y personas inmunodeprimidas: «La sociedad debe centrar sus esfuerzos en proteger a las personas más vulnerables en lugar de tratar de frenar la circulación del virus. La capacidad de Salud Pública y Atención Primaria para testear a todas las personas es prácticamente inútil. Deberíamos centrarnos en la protección de personas más vulnerables mediante vacunación, recomendaciones específicas y recomendaciones en residencias».

Tenemos que dejar de contar el número de infecciones diarias, al igual que no reportamos el número de resfriadosDoctor Albert Planes, director de Actualización en Medicina de Familia (AMF)

Sobre la vuelta al cole, opina que: «Es urgente recuperar la normalidad en el ámbito escolar. Algunos Gobiernos y algunos medios siguen usando el medio como estrategia comunicativa. Errar por exceso de alarma penaliza menos que errar por defecto. Ha llegado el momento de comunicarnos como una sociedad adulta. Tenemos que dejar de contar el número de infecciones diarias, al igual que no reportamos el número de resfriados que sufrimos. Lo importante deberían ser los casos graves, las hospitalizaciones y las defunciones».