El Gobierno paga más por los test de antígenos que un portugués en el Mercadona
En la última transacción, España pagó 3,10 euros la unidad, mientras que en el país vecino cuesta 2,10.
El Gobierno se gastó quince millones y medio de euros en la compra de cinco millones de test de antígenos. Es decir, ha pagado 3,1 euros por unidad en un producto que se puede encontrar a menor precio en las tiendas de algunos países europeos.
El contrato se firmó el pasado 5 de enero a través de un negociado sin publicidad y por la vía de emergencia –para evitar requisitos de procedimiento–. En él se detalla la compra de cinco millones de test de antígenos Panbio Covid 19 Ag Rapid Test Device Nasal 25T NS por parte del Instituto Nacional de Gestión Sanitaria a la empresa Abbott Rapid Diagnostics Healthcare a cambio de 15.500.000 euros.
A 3,10 euros por unidad, se trata de un precio muy superior al que se pueden encontrar en los supermercados alemanes, donde cuestan 1,75 euros como máximo, o en Portugal, donde la compañía española Mercadona los vende a 2,10 euros.
Esta transacción se produce unos días antes de que el Gobierno haya anunciado la regulación de los test de antígenos –cuyo precio máximo se establece en los 2,94 euros–, una decisión no exenta de polémica, ya que las grandes superficies habían pedido, como ocurre en otros países europeos, la posibilidad de poner a la venta este producto en sus tiendas.
De hecho, la Asociación Nacional de Grandes Empresas de Distribución (ANGED) explicaba hace unos días que la distribución comercial de las pruebas de antígenos «puede ayudar en esta fase de la pandemia a hacer más asequible el autodiagnóstico y detención de contactos».
Sin embargo, el Ministerio de Carolina Darias no contempló esta propuesta, ya que entiende que un producto sanitario como este debe ser dispensado por profesionales sanitarios, a diferencia de lo ocurrido con las mascarillas, disponibles en los comercios desde abril de 2020, al inicio de la pandemia.