Así perjudicará la nueva reforma de la ley del aborto a las mujeres
Los expertos explican en qué condiciones se debería dar la baja y cómo será la situación si se reforma la ley
España puede convertirse en el primer país europeo y de los pocos del mundo que reconozca los permisos menstruales, después del pacto alcanzado entre los ministerios de Igualdad y de la Seguridad Social para incluir esta baja en la futura ley del aborto.
A falta de que se cierren todos los flecos y el texto llegue al Consejo de Ministros del próximo martes 17, fuentes del Gobierno han precisado que las bajas serán asumidas desde el primer día por la Seguridad Social y no por la empresa, y no se exigirá un mínimo cotizado como en otras incapacidades temporales comunes.
La baja no comprenderá un número de días concretos, sino que serán los que necesite cada mujer. Medidas que no todos los sanitarios o expertos en sanidad ven claro.
En Europa, esta medida no existe. En Italia se presentó una propuesta de ley en ese sentido en 2016 pero nunca ha llegó a aprobarse, en Francia no hay nada oficial pero sí es un asunto que se debate y en Alemania las mujeres pueden acudir al médico de familia para que les dé una baja por dolores menstruales, pero es a criterio del médico.
Sí está reconocido en Japón desde 1947, Corea del Sur e Indonesia y en Zambia, desde hace años, la legislación laboral recoge el denominado «Día de la madre»: toda empleada tiene derechos a un día libre al mes sin necesidad de presentar certificado médico o de justificarse ante su empleador.
Mientras tanto, en España se ha abierto el debate en los pasillos del Congreso, en la calle, en las redes sociales... y los expertos como ginecólogos y médicos de familia instan a no banalizar un problema que padecen muchas mujeres.
Medida que «no se debe banalizar»
La psicóloga sanitaria, forense, colegiada en el Colegio Oficial de la Psicología de Madrid, Timanfaya Hernández Martínez, explica que «a las mujeres este problema no les afecta psicológicamente. Pero el problema que principalmente tiene esto es que la mujer tiene que estar siempre haciendo mayor esfuerzo, tiene que demostrar que vale y podría traducirse en una situación de estrés que podría repercutir en el trabajo».
«Hay mujeres que tiene menstruaciones muy dolorosas, tanto que a veces pueden ser incapacitantes. Pero lo mismo pasa con una gastroenteritis, en ambos casos no se sabe si la persona está mal o muy mal. La persona tiene el control de su cuerpo y solo ella sabe como realmente está y si se tiene que quedar en casa o no», añade la colegiada.
En esta nueva reforma las mujeres podrían sufrir discriminación laboral, ya que Montero propone unas modificaciones que ensalzan las posibilidades del hombre, todo lo contrario a lo que prometió: «El hecho de tener una baja por ejemplo maternal hace que las mueres sufran una situación laboral discriminatoria. No obstante, gracias a Dios cada vez esto va a menos y estamos más concienciados», añade Timanfaya.
Si a una entrevista de trabajo va un apersona cojeando no le van a discriminar por tener cojera, y ni siquiera le van a preguntar si tienes alguna enfermedad
«Esto es muy sencillo, si a una entrevista de trabajo va una persona cojeando no le van a discriminar por tener cojera, y ni siquiera le van a preguntar si tienes alguna enfermedad. Lo mismo deberá pasar en esta situación de baja con las mujeres, no se debe preguntar si las reglas son dolorosas o no. Por el mero hecho de que es ofensivo», concluye.
El responsable del grupo de trabajo de Salud de la Mujer de la Sociedad de Médicos Generales y de Familia, Lorenzo Armenteros, afirma que la menstruación dolorosa invalidante es un motivo de baja estipulado y que lo que quiere hacer la norma es dar la posibilidad de que pueda extenderse de forma habitual a la mujer que la padece.
«Los médicos damos bajas, pero es poco habitual, verdaderamente son aquellas en las que el dolor es absolutamente invalidante, que no pueden moverse de la cama. Tienen que llegar a un estadio muy grave para que una mujer coja la baja, esa es la verdad», afirma Armenteros.
La regla es dolorosa, recuerda el experto, porque tiene una fase inflamatoria muy importante y se produce el desprendimiento de un tejido en el interior de un órgano.
La mujer tiene suficiente responsabilidad para distinguir cuando su regla es dolorosa e invalidante
Armenteros señala que un de los problemas es que este debate se convierta en que «todas las mujeres, cuando tengan la regla, se cojan una bajita y estén tranquilamente», algo que rechaza de plano.
«La mujer tiene suficiente responsabilidad para distinguir cuando su regla es dolorosa e invalidante, y el médico tiene el suficiente criterio para poder valorar si es necesario una baja cuando corresponda. No se trata de banalizar el asunto», argumenta.
El dolor esconde otras patologías
Detrás de reglas dolorosas puede ser que no haya ninguna causa aparente, pero también puede ser la punta del iceberg de problemas de salud como la endometriosis, los miomas uterinos, anomalías uterinas u otras patologías hormonales, entre otras, tal y como explica desde la Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia (SEGO) José Eduardo Arjona, en declaraciones a Efe.
«Desde el punto de vista médico, ninguna mujer exagera su dolor con la regla», señala el experto, que reconoce que «muchas veces» los profesionales hacen «poco caso» a la dismenorrea y también las mujeres tienen asimilado el dolor como algo normal y no puede ser así.
Arjona señala que hay tratamientos como los antiinflamatorios y fármacos hormonales, pero hay casos en los que no es suficiente: «En 30 años de profesión no he visto ninguna mujer que se queje por quejarse, es más, muchas veces yo tengo incluso que regañar a las pacientes y decirles que no tengan como normal el dolor de regla».