Llega la cerveza en polvo, el invento de unos monjes para reducir la huella ambiental

Es una de las bebidas más consumidas a nivel mundial junto el café. La cerveza se asocia al descanso, a los momentos distendidos con amigos, familia o compañeros. Sin embargo, pocos saben que su industria es una de las que más impacto ambiental genera.

Por ello, se han puesto a trabajar para intentar reducirla, y la delantera la ha tomado una empresa alemana que está desarrollando una cerveza en forma de polvo, tal y como recoge el medio Magnet.

Con este invento se permitiría ahorrar costes y recursos en el proceso de fabricación, así como aligerar notablemente los envíos disminuyendo así el uso de transportes y, por ende, las emisiones de CO2 procedentes de los mismos.

Ha sido la empresa alemana Klosterbrauerei Neuzelle (cervezas de monasterios), fundada y gestionada por monjes cerca de la ciudad de Múnich, con el apoyo del grupo BMWi y del el Ministerio Federal de Economía de Alemania, quien anunció este nuevo producto que posee «todos los ingredientes» de una cerveza tradicional.

Su funcionamiento es parecido al del cacao en polvo: tan solo hay que mezclar los polvos con agua carbonatada (en casos excepcionales, con agua del grifo) para que se forme espuma «con todo su sabor». Teniendo el cuenta que el 90 % de la cerveza es agua, la empresa, además de ahorrarse el líquido, puede enviar su producto con un 10 por ciento del peso habitual.

La empresa se encuentra ahora introduciendo esta novedad en el mercado en pequeñas cantidades, y lo hará así hasta mediados de año. Sin embargo, sus pretensiones son ampliar la producción en el futuro próximo, siempre que tenga buena acogida entre los consumidores.

Los responsables apuntan que no solo quieren incluir este producto en la vida de los consumidores, sino cambiar el modelo de negocio de la cerveza. "Hemos calculado que, en lo que respecta a Alemania, podemos ahorrar entre un 3 y un 5 % de las emisiones de CO2. Y si lo miras globalmente, eso sería alrededor de la mitad de las emisiones de CO2 en todo el mundo».