El exceso de mortalidad en la UE siguió aumentando en el mes de abril

El exceso de mortalidad en la Unión Europea (UE) vuelve a alcanzar niveles propios de otros períodos de la pandemia de la covid. Los últimos datos que proporciona Eurostat –Oficina Europea de Estadística–, correspondientes a abril de este 2023, muestran un aumento respecto al mes anterior situándose un 2,7 % por encima de la línea de base, que es el promedio de muertes para el mismo período en 2016-2019.

Este exceso de mortalidad se refiere al número de fallecimientos por todas las causas medidas durante una crisis por encima de lo que podría observarse en condiciones normales. El indicador de exceso de mortalidad toma el número de personas que murieron por cualquier causa y lo compara con una línea base histórica de años anteriores en un período no afectado por la pandemia de la covid.

Estas cifras empeoran las del mes de febrero, cuando por primera vez desde el inicio de la pandemia no hubo exceso de mortalidad, cayendo el indicador a -1,5 %. En abril, esta tasa ha vuelto a niveles anteriores, con un 2,7 %, más notable que en marzo, cuando el exceso de mortalidad estaba ligeramente por encima de la línea de base en +0,6 %.

Aun así, estos números se quedan lejos de los del mismo mes de 2022, cuando fue del 12 % con 40.200 muertes en exceso; de 2021, con un 20,9 % y 73.600 fallecimientos; o de 2020, que fue del 25,2 % y 105.000 muertes en exceso.

Datos por países

En abril de 2023, 17 países de la UE registraron un exceso de muertes. Entre ellos se encuentran Austria (13,2 %), Finlandia (12,4 %), Luxemburgo (12,3 %) e Irlanda (12,2 %), que notificaron las tasas más altas. Entre los países que no observaron un exceso de muertes están Rumanía (-12,2 %), Bulgaria (-8,7 %) y Lituania (-7,7 %), que registraron las tasas más bajas.

En el caso de España, el exceso de mortalidad en abril de este año se mantuvo cercano a la media europea, con 2,2 %. Sin embargo, mientras en los meses anteriores la cifra bajaba en la UE, en España no dejó de subir. Salvo en enero, cuando cayó en nuestro país -1,5 %, en febrero y marzo aumentó un 6 y un 6,1 % respectivamente, mientras a nivel europeo caía un -1,5 y ascendía un tímido 0,6 % en los mismos dos meses.

Nuestro país se sitúa, por tanto, a la par que nuestros vecinos portugueses y franceses, así como Polonia, Suecia y Noruega. Los países del este del continente son los que mejores datos presentan, con valores iguales o menores a cero, con la excepción de Grecia, que se encuentra en el 9,2 %.