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La cultura de la muerte, en cifras: los métodos que más usaron las menores en 2024 para abortar

El incremento de estas prácticas es una verdadera preocupación que los poderes públicos han dejado «en el cajón»

En 2023, España alcanzó un año más su máximo de abortos. En solo un año, 103.097 bebés no pudieron descansar en el seno de su madre, un 4,8 % (4.781) más que en 2022. Entre las mujeres que se sometan a estas polémicas prácticas, destaca un grupo: el de las adolescentes.

Tras evaluar la situación de España, el Instituto de Política Social (IPSE) ha elaborado un documento denunciando esta situación. Y es que el incremento de abortos es una verdadera preocupación que «los poderes públicos han dejado en el cajón». Según esta organización, la nueva norma abre las puertas a que las menores, sin consentimiento paterno, procedan a someterse a «la práctica más complicada» a la que se someterán en toda su vida: acabar con la vida de su hijo.

Pablo Hertfelder García-Conde, presidente del IPSE, afirma que «el problema es gravísimo». Así, apunta que los poderes públicos están dejando al descubierto que «no les importa realmente la salud de las más pequeñas» y en definitiva, que no les importa «la vida del más indefenso». "Además, ha proseguido, se está promoviendo una sociedad más degenerada, sexualizada y sin preparación suficiente» para afrontar la realidad de lo que es «dar llamada a la vida, a través del embarazo».

La píldora del día después, la más usada

Desde que el Congreso de los Diputados dio luz verde a una de las normas más crueles para la vida del ser humano, los abortos entre adolescentes no han parado de aumentar. Una de las principales razones ha sido permitir a las menores de 16 y 17 años acudir a las clínicas o comprar químicos sin el permiso de sus padres.

Esto se refleja en los datos facilitados por la IPSE, donde afirman que el aborto químico ya se ha convertido en la elección preferida de las adolescentes entre 15 y 16 años, con un incremento del 15,5 % más que en el año 2023. El dato más preocupante es el incremento de esta práctica entre las más jóvenes, ya que «al día se producen 62 abortos químicos en España», denuncia el Instituto.

Por otro lado, el aborto quirúrgico se dispara un 40,5 % más entre las jóvenes de 17 y 18 años, tanto en clínicas privadas como en hospitales públicos.

Además, comenta el informe de la organización, tres de cada cinco adolescentes menores de 20 años embarazadas se deshacen de su feto. En cifras, más de 10.000 menores ya se han sometido a esta controvertida práctica. Además de ello, «cinco de cada seis menores de 15 años embarazadas han abortado», incide Hertfelder García-Conde.

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