Muface prevé una oleada de cambios de los funcionarios a la sanidad pública este mes de enero

En apenas una semana se conocerá qué ocurrirá con el futuro de Muface. El próximo miércoles 15 termina el plazo para adherirse a la licitación del modelo sanitario, a la que Adeslas ha decidido ya que no se presentará. Todo queda, por ende, en manos de las otras dos aseguradoras que hasta ahora participaban en el concierto (Asisa y DKV) o de las que puedan sumarse a él (como Allianz, que habría mostrado su interés para dar cobertura a los funcionarios en el extranjero).

Entretanto, ya se ha abierto el plazo para que los servidores públicos puedan cambiarse a la sanidad pública, si lo desean. Como concierto actual termina el próximo 31 de enero y la continuidad del mismo no está asegurada todavía, los mutualistas no podrán cambiarse de aseguradora ni de la pública a la privada, pero sí podrán migrar desde el modelo concertado al servicio sanitario del Sistema Nacional de Salud (SNS).

Desde la mutualidad prevén que este éxodo a la pública sea mayor que en años anteriores debido precisamente a esa inestabilidad. Los usuarios de Adeslas, que ya ha anunciado que no seguirá en el concierto, son previsiblemente los que más migrarán debido al miedo de que se puedan quedar en el aire o a que les puedan cancelar citas médicas o intervenciones. Esta oleada de cambios a la pública podría servir también para que los funcionarios tanteen el terreno ante la que podrá ser su futura sanidad y evitar así que la absorción por parte del sistema público sea de golpe.

No obstante, este cambio que pueden realizar los funcionarios no será para todo el año si no lo desean. La mutualidad abre la puerta a que esas personas que abandonen el concierto sanitario puedan regresar una vez finalice la licitación. «A partir del momento en que esté vigente el nuevo concierto y hasta la fecha que se disponga, se abrirá un segundo plazo para realizar el cambio desde servicio de salud autonómico a una entidad concertada o entre entidades concertadas que sean adjudicatarias del servicio», avanzan.

Recalcan que aquellas personas que opten por cambiar al INSS durante el mes de enero «podrán revertir su decisión en el segundo plazo y adscribirse a una entidad concertada, si así lo desean». Esto supone una novedad, ya que habitualmente si un funcionario hacía el cambio al sistema público no podrían retornar al privado hasta enero del año siguiente.

La fecha exacta del segundo cambio, calculado en abril, aún se desconoce, ya que dependerá de cómo termine la licitación actual. Cabe la posibilidad de que esta vuelva a quedar desierta tras la renuncia de Adeslas, lo cual cambiaría por completo el panorama del mutualismo administrativo.

De esta forma, muchos se animan a probar el sistema público por unos meses y otros prefieren refugiarse en él hasta que se estabilice la situación del modelo de Muface. Si finalmente las dos aseguradoras restantes se adhieren a la licitación, podrán retornar a la privada o, por el contrario, permanecer en el SNS si el trato recibido en estos meses de «prueba» ha sido de su agrado.

Óscar López sigue pidiendo «tranquilidad»

Tras el rechazo de la aseguradora que aglutina a un mayor porcentaje de empleados públicos, Adeslas, el ministro para la Transformación Digital y de la Función Pública y secretario general del PSOE-M, Óscar López, continúa pidiendo «tranquilidad» a los mutualistas de Muface y resalta los «esfuerzos sin precedentes» que está haciendo el Gobierno.

«Reitero el mensaje, tranquilidad», subrayó el pasado fin de semana en declaraciones a los medios antes de asistir en los Cines Verdi a la proyección del documental '7.291' sobre los primeros meses de pandemia en las residencias de mayores en la Comunidad de Madrid.

En este sentido, ha recordado que se ha prorrogado el servicio en base a la ley de contratos, «y por lo tanto están todos cubiertos por esa prórroga» y, además, se está «en plazo todavía» para el nuevo concierto para prestar asistencia sanitaria a los funcionarios cubiertos por la mutualidad Muface y a la espera de la respuesta de todas las aseguradoras.

Igualmente, ha puesto en valor que el Gobierno ha hecho «esfuerzos sin precedentes» con la nueva oferta. «Estamos hablando de 4.500 millones de euros en tres años, estamos hablando de una subida superior al 30 %, estamos hablando de casi mil millones más que el último concierto», ha zanjado.

A preguntas de los medios sobre la postura de la Comunidad de Madrid en este tema, con una petición de contraprestación económica en caso de que la sanidad pública asuma la asistencia de los mutualistas, el secretario general del PSOE-M ha subrayado que el Gobierno de Isabel Díaz Ayuso lo que debería hacer «es financiar la sanidad pública y no recortarla como está haciendo a deteriorarla en Madrid».