Un río atmosférico acabará con la estabilidad y traerá lluvias, nieve y descenso térmico

Sol, temperaturas inusualmente altas para la época y ausencia casi total de precipitaciones. Este ha sido el panorama reinante en España durante gran parte del mes de enero y así ha comenzado también febrero. Unos valores que han rondado los 20 grados en buena parte del país y que incluso se han registrado récords de temperaturas en algunas zonas.

Una situación agradable, pero que nada tiene que ver con el tiempo que debería hacer en estos meses de invierno y que poco favor le hacen a la situación hídrica del país, necesitada de agua, sobre todo en el sur y este peninsular.

Por eso, un cambio de tiempo a la vuelta de la esquina trae esperanzas. Según avanzan desde Meteored, la estabilidad atmosférica tiene las horas contadas en España. La dorsal anticiclónica que nos ha acompañado en estas dos últimas semanas por fin cederá, retirándose hacia el este, y el chorro polar bajará de latitud, lo que permitirá que las borrascas y sus frentes puedan aproximarse más hacia nuestro país.

Coinciden en este pronóstico desde la web especializada Eltiempo.es, y avanzan que será a partir del próximo miércoles cuando el anticiclón de bloqueo que lleva con varios días con nosotros comenzará a debilitarse y a retirarse hacia el sureste.

Será en ese momento cuando se abra un río atmosférico de humedad y comiencen a llegar nubes a la vertiente atlántica, una situación que irá a más llegando el jueves un primer frente atlántico que dejará lluvias en todo el norte peninsular. El viernes se extenderían al oeste y zona centro, así como a los Pirineos, pero no se esperan en el este, que tanto necesitan esa agua.

Desde Eltiempo.es prevén que el viernes pueda llegar un frente mucho más activo que cruzaría la Península y este sí que podría dejar lluvias en el área mediterránea, así como en el sur del sistema Central, Andalucía occidental y Galicia.

Tras el paso de este frente, un aire más frío podría entrar en España, lo que haría que bajasen tanto las temperaturas como la cota de nieve, haciendo que esta vuelva a todos los sistemas montañosos de la Península, para alegría de los amantes del esquí. A pesar de que aún quedan varios días, las tendencias parecen claras: habrá un cambio de tiempo que romperá con las temperaturas cálidas y la ausencia de lluvias y volverá a traer precipitaciones, tanto en forma líquida como sólida, a buena parte de España.