«Europa genera ideas y tecnología, pero no logra comercializarlas»: Antonio Roldán (Esade) descifra el Informe Draghi
El director del Centro de Políticas Económicas puso el foco en que «la productividad lleva años estancada en Europa»
Europa, China, y Estados Unidos, la carrera por la productividad se topó en el viejo continente con el famoso Informe Draghi, un abrupto choque con la realidad y una llamada de atención a un continente que tiene serios problemas con su futuro.
En un evento organizado por South Summit y Google para analizar el Informe Draghi, Antonio Roldán, director del Centro de Políticas Económicas de Esade, destacó un tema clave que empieza a preocupar a muchos gobiernos europeos: «La seguridad y la competitividad en el escenario global».
«Desde el 2008 al 2021, 40 de los 147 unicornios nacidos en la UE se han ido a Estados Unidos, mientras que un 70 % de los modelos de IA se han desarrollado en ese país», ha advertido Roldán, quien afirma que parte de la solución para cerrar la brecha de innovación con Estados Unidos y China «pasa por permitir más innovación en un entorno cada vez más dinámico».
Desde el 2008 al 2021, 40 de los 147 unicornios nacidos en la UE se han ido a Estados UnidosDirector del Centro de Políticas Económicas de Esade
«Más de la mitad de las pymes en la UE dice que su principal desafío son los obstáculos regulatorios, mientras que China y Estados Unidos pueden producir mucho más y hacer inversiones más agresivas. Eliminar estas múltiples regulaciones y permitir el nacimiento de un mercado único en la UE, así como garantizar una mayor coordinación entre los Estados miembros para proteger nuestra competitividad y puestos de trabajo, son los dos primeros mensajes que debemos dar para hallar una solución», ha sentenciado Roldán.
Europa ha estado perdiendo terreno frente a Estados Unidos y, más recientemente, frente a ChinaDirector del Centro de Políticas Económicas de Esade
Uno de los mayores problemas en Europa es que, «aunque genera ideas y tecnología, no logra comercializarlas de manera eficiente.
La carrera tecnológica
Desde la década de los 90, Europa ha estado perdiendo terreno en el ámbito tecnológico. «Mientras que Estados Unidos lideraba la carrera de internet y China emergía como un gigante de la manufactura y la innovación, Europa se mantuvo rezagada. Ahora, China ha dejado de ser un mero socioeconómico y se ha convertido en un competidor que impulsa su crecimiento a través de políticas industriales agresivas y producción a gran escala sin las barreras regulatorias que enfrenta Europa».
China ha dejado de ser un mero socioeconómico y se ha convertido en un competidorDirector del Centro de Políticas Económicas de Esade
El contexto geopolítico también ha cambiado drásticamente. «La globalización, que impulsó el crecimiento en Europa durante las últimas décadas, está retrocediendo. La energía barata proveniente de Rusia, que alguna vez fue una ventaja competitiva, ya no está disponible. Además, el «dividendo de la paz», por el que Europa no invertía en defensa porque Estados Unidos proveía seguridad, ha llegado a su fin». El entorno global es cada vez más inseguro y «Europa no puede seguir dependiendo de la estabilidad geopolítica externa».
Declive demográfico
El crecimiento demográfico fue una de las claves para la convergencia económica en Europa durante los últimos 40 años. «Sin embargo, este crecimiento se ha detenido. De hecho, se espera que para 2040 la fuerza laboral europea se reduzca en dos millones de personas por año. Esto significa que Europa tendrá que ser más productiva si quiere evitar una tendencia al crecimiento cero y la parálisis económica», comentó Roldán.
Mientras, «China ha implementado una política industrial agresiva, invirtiendo en innovación y producción a gran escala. Estados Unidos, por su parte, ha protegido su productividad a través de inversiones en tecnología y políticas que favorecen la competitividad».
China ha implementado una política industrial agresiva, invirtiendo en innovación y producción a gran escalaDirector del Centro de Políticas Económicas de Esade
Europa, en cambio, «sigue atrapada en un mercado fragmentado, con demasiados objetivos y poca coordinación entre las políticas nacionales. La regulación excesiva a las startups y las diferencias regulatorias entre los países miembros limitan la capacidad de crecimiento y expansión de las empresas europeas».
Inversión
Otro pilar fundamental es la inversión. Roldán sugiere que Europa debería invertir el 5 % de su PIB en innovación cada año para ponerse al día con sus competidores. Esto no solo implicaría más fondos, sino también una mayor flexibilidad en la regulación para que las empresas puedan crecer y competir en un mercado global.
Finalmente, Roldán argumenta que, en una Europa de 27 países, es necesario permitir diferentes velocidades de progreso. No todos los países están en la misma situación económica y política, por lo que es importante que algunos puedan avanzar más rápidamente en áreas como la innovación, mientras que otros se ponen al día.