Registran 13 anomalías en la cápsula Orion de la misión Artemis I
A pesar de todos los daños que ha sufrido Orion, el equipo anunció que la misión «está superando expectativas»
Tras cuatro retrasos, dos por fallos técnicos y otros dos por fenómenos meteorológicos, el pasado 16 de noviembre se lanzó con éxito la misión Artemis I, o eso parecía. Este nuevo avance de la NASA, que permitirá transportar a astronautas en 2024 gracias a su «hermana» Artemis II, ha registrado 13 contratiempos en la cápsula Orion, la mitad de ellos en los CubeSats, unos satélites miniaturizados que se encargan de la investigación espacial y que la misión empleará para fines científicos.
Artemis I es la primera misión lunar no tripulada que transportará de nuevo a los humanos a la luna gracias a la nave Orion. Si todo va bien, el cohete permanecerá en órbita una media de 25 días, once horas y 36 minutos, retornando a la Tierra el 11 de diciembre.
La agencia espacial estadounidense publicó el pasado viernes que se produjeron varios fallos. Uno de los más importantes afectó al sistema de navegación de la nave, que aunque sepa hacia donde se tiene que dirigir por su sistema de orientación por los puntos luminosos de las estrellas, ha enviado lecturas anómalas a la NASA, lo que podría afectar al rumbo de la sonda.
Las otras 12 anomalías son «fallos menores» según comunicaron. No obstante, la que más preocupa es la que afecta a los pequeños satélites CubeSats. Todas estas «cajas de zapatros»llegaron a sus órbitas tal y como estaba planeado, pero cinco de ellos tuvieron «problemas técnicos después, han experimentado comunicaciones intermitentes o, en un caso, no hemos recibido señal tal y como estaba planeado», explicó el responsable de la misión Artemis I, Mike Serafin. El resto de ellos están en perfecto estado y van «camino del éxito».
El responsable de la misión también señaló que durante el lanzamiento se produjeron varios desperfectos. Uno de ellos estuvo relacionado con las puertas del cohete que estallaron durante el lanzamiento.
Los científicos esperaban desperfectos tras el despegue y por ello, «el equipo está procediendo con mucha precaución para obtener el estado completo del lanzador móvil, y están trabajando para arreglarlo», señaló Serafin.
A pesar de todos los daños que ha sufrido Orion, el equipo anunció que el lanzamiento y la misión «están superando expectativas».