Gala de los Goya 2022 ¿Cuánto dinero se llevan los ganadores de los Goya?
El actor Roberto Álamo confesó que puso a la venta su primera estatuilla
La gala de los Goya finaliza, un año más, dejando titulares de todo tipo. Los discursos, los reclamos y las peticiones de los galardonados, así como de los presentadores, se traducen, como en cada edición, en clave política.
Los actores, actrices, productores, guionistas, directores, montadores y un largo etcétera se enfundan sus mejores galas para, en caso de ser el elegido, recoger la estatuilla y poder dedicar unas palabras al público. Recibir un Goya, en contra de lo que la mayoría pudiera pensar, no se traduce en una compensación económica para el galardonado.
El premio reconoce el trabajo del premiado destacándolo de sus compañeros, pero no posee un valor en metálico. Las propias bases de los Goya son muy claras a este respecto: «en ningún caso los premios concedidos podrán ser canjeados por un pretendido valor en metálico».
Asimismo, dentro de las normas especifican que «los participantes en la presente convocatoria, así como en cualquiera de sus fases y procesos renuncian expresamente a cualquier compensación pecuniaria o de carácter indemnizatorio como consecuencia de las decisiones tomadas por la Academia durante el mismo».
Tampoco está permitido hacer negocio con el galardón. «Los ganadores del premio adquieren la propiedad de la estatuilla, no adquiriendo derecho alguno de explotación sobre la misma», es decir, que no pueden vender el Goya. En los Oscar pasa un poco lo mismo.
Los premiados no reciben una contraprestación económica, pero si pueden vender la estatuilla dorada, sólo que por la ridícula cifra de un dólar, ya que desde el año 1950 los ganadores firman un documento que así lo establece.
A pesar de todas estas normas existen ejemplos de actores que ha puesto a la venta su galardón. Como es el caso de Roberto Álamo, el actor llegó a confesar que puso a la venta su primer Goya en Wallapop después de pasar nueve meses sin encontrar trabajo.