El villano Hernán, el inhumano Amancio y el ausente Juan Carlos

El programa que TVE se ha montado al rebufo de la BBC para elegir a la persona más relevante de nuestra historia a partir de un listado previo de 50 le está saliendo rana a la cadena pública. Por ahora, transcurre entre las polémicas montadas por sus invitados y la indiferencia del público (este viernes solo consiguió reunir ante la pantalla a 450.000 de los 48.592.909 españoles).

En el primer programa, se montó un debate tipo Sálvame entre una desatada Mercedes Milá y el ex ministro García-Margallo. La catalana llamó al conquistador Hernán Cortes —uno de los 50 aspirantes a ser el mejor español de la historia— nada menos que «asesino», «villano» y «animal». Y se quedó más ancha que larga.

Esta semana los invitados tenían un perfil en teoría más amable. Pero dos de ellos, Arturo Valls y Paula Vázquez, la tomaron con Amancio Ortega, al que reprocharon su falta de humanidad. No se quedó ahí el asunto: a Rafa Nadal se le reprochó su vínculo con Arabia Saudí y a Salvador Dalí su entrega al franquismo.

Es de esperar que la semana próxima les toque ser despreciados a Pablo Picasso y a Cristóbal Colón. Lo vemos venir: al primero lo pondrán de maltratador y al segundo de opresor de nativos americanos. Son dos de los diez componentes del grupo C, del que saldrá el tercer finalista del concurso, tras Federico García Lorca e Isabel I. Competirán con Ángel Nieto, Benito Pérez Galdós, Chicho Ibáñez Serrador, Felipe González, Jesús Quintero, Paco de Lucía, Severiano Ballesteros y Severo Ochoa.

Las polémicas no acaban ahí. Ya han sido tres los comentaristas invitados que han criticado la falta de valencianos en la lista. El primer día fue José Manuel García-Margallo y este viernes lo hicieron el valenciano Arturo Valls y el castellonense Carlos Latre.

Sin Juan Carlos I

Hablando de ausentes, en el programa del viernes se recordó que ya en una ocasión en España se hizo una elección similar en una televisión. Fue en Antena 3, en 2007. El Rey Juan Carlos I fue proclamado como El Español de la Historia, por delante de Cervantes y Colón. De estos tres solo hay uno que no figura ahora entre los 50 más relevantes de La 1: sí, el padre de Felipe VI, quien —por cierto— resultó eliminado en la noche del viernes.

Por si fuesen pocas las desgracias, los telespectadores están dando la espalda a la elección del mejor español de la historia. ¿Elegir al más relevante no lo consideran relevante? ¿O quizá consideran que el método elegido por la cadena pública no es el más adecuado? El programa presentado por Silvia Intxaurrondo se estrenó con un bajísimo 6,8 % de cuota de pantalla. Pero no, no había tocado fondo. Este viernes se precipitó hasta el 5,1 %: buena parte de los que estaban viendo el partido de la selección femenina de fútbol (12,1 % de share) cambiaron de canal según se escuchó el pitido final del partido. Lo peor para la dirección de RTVE es que aún quedan otras cuatro galas por delante, tres para elegir otros tantos finalistas y el asalto definitivo.