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08 de septiembre de 2024

Hugh Jackman, durante el preestreno de Deadpool y Lobezno en Berlín

Hugh Jackman, durante el preestreno de Deadpool y Lobezno en BerlínGTRES

Cine

El truco de Hugh Jackman para conseguir el papel de Lobezno tras ser rechazado

El actor fue descartado en un primer momento debido a su elevada estatura

En el vasto universo cinematográfico de Marvel, uno de los personajes más icónicos y queridos es Lobezno (Wolverine), también conocido como Logan. Encarnado magistralmente por Hugh Jackman, Wolverine es un mutante con garras retráctiles de adamantium, una habilidad regenerativa y un temperamento indomable que lo han convertido en una leyenda de los X-Men.

Sin embargo, la historia detrás de la elección de Hugh Jackman para interpretar a este héroe no fue tan fácil como podría pensarse. Inicialmente, Dougray Scott fue seleccionado para el papel de Wolverine en la película X-Men de 2000, dirigida por Bryan Singer. Sin embargo, debido a conflictos de agenda con otra producción en la que estaba comprometido (la película Misión Imposible 2), Scott tuvo que abandonar el papel de Logan. Esta decisión inesperada abrió la puerta para que Hugh Jackman fuera finalmente seleccionado como el icónico mutante de garras de adamantium, un papel que lo catapultó a la fama internacional y que interpretaría durante casi dos décadas en varias películas de la franquicia.

Cuando Jackman audicionó por primera vez, no impresionó demasiado y estaba convencido de que sería rechazado. Sin embargo, Kevin Feige, quien entonces trabajaba como asistente de producción, decidió invitarlo a comer con el guionista. Después, Jackman fue elegido. Pero aquí surgió un pequeño dilema: el actor, con su imponente estatura cercana al 1,90, era físicamente opuesto al Wolverine de los cómics, que mide apenas 1.60 metros.

La disparidad en la estatura planteó un desafío considerable. ¿Cómo podría Hugh Jackman transformarse físicamente para dar vida a un personaje tan emblemático y fiel al cómic? La solución ingeniosa fue adoptar varios trucos visuales para hacer que Jackman pareciera más bajo en pantalla. Durante las primeras audiciones y tomas, Jackman caminó agachado y sin usar zapatos para reducir la percepción de su altura. Además, los actores que compartían escena con él, a menos que fueran niños, eran seleccionados para ser más altos que él, y se empleaban plataformas y cajas para nivelar las alturas durante las escenas.

El propio Hugh Jackman recordó este desafío con humor y determinación en una entrevista para CNN, mencionando cómo al principio simplemente se agachaba y evitaba los zapatos para mantenerse fiel a la estatura del personaje. «Yo caminaba agachado, sin zapatos, las personas iban sobre tablones y cajas alrededor de mí. Pusieron mucho esfuerzo. Después de un tiempo se dieron por vencidos», dijo con una sonrisa, recordando los esfuerzos del equipo de producción por mantener la coherencia visual.

A pesar de estos obstáculos, Hugh Jackman no solo logró adaptarse físicamente al papel, sino que también fue aclamado unánimemente por su interpretació. Incluso Chris Claremont, el legendario guionista de los cómics de X-Men, expresó su admiración: «Clavó al personaje. No puedo pensar en nadie que pudiera haberlo hecho mejor o incluso igual de bien».

Así, Hugh Jackman se convirtió en el rostro definitivo de Wolverine en el cine, superando las expectativas y demostrando que, con talento y dedicación, las diferencias físicas pueden superarse para dar vida a un personaje tan icónico.

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