Cine
El secreto de la escena más icónica de Robert Redford y Meryl Streep en 'Memorias de África'
El estilista capilar fue quien enseñó a Redford cómo debía proceder para lavar el cabello de Streep
La película Memorias de África, dirigida por Sydney Pollack, es un auténtico referente del cine romántico y un testimonio del talento interpretativo de Meryl Streep y Robert Redford. Adaptación de la biografía de la escritora danesa Karen Blixen, este clásico cinematográfico no solo narra una historia de amor, sino que también explora las complejidades de la vida en Kenia a principios del siglo XX.
Una de las escenas más recordadas y emblemáticas es aquella en la que Denys Finch Hatton (interpretado por Redford) lava el cabello de Karen Blixen (Streep) junto a un río. Esta secuencia, cargada de sensualidad y complicidad, se ha convertido en un símbolo del romance en el cine. En palabras de Streep: «Hemos visto tantas escenas de gente haciendo el amor… Sin embargo, no solemos ver escenas con el tipo de sensualidad que exploramos en Memorias de África». Su comentario subraya la sutileza de esta escena, que va más allá de lo físico y se adentra en la intimidad emocional entre los personajes.
El proceso para filmar esta icónica secuencia no estuvo exento de desafíos. Meryl Streep recuerda que, durante el rodaje, «había dos peligros: los leones y, sobre todo, los hipopótamos, que son los animales que matan a más personas en África». La actriz menciona cómo su peluquero, Roy Helland, jugó un papel crucial en la creación de esta escena.
Fue él quien enseñó a Redford a masajear su cabeza suavemente, aportando un nivel de intimidad y autenticidad al momento. «Cuando llegamos a la quinta toma, yo ya estaba disfrutando a lo grande, y creo que eso se percibe en la película», dice Streep, reflejando la genuina conexión que se estableció entre los actores.
La escena es sutilmente erótica, una muestra de ternura y conexión que contrasta con la violencia que rodea a los personajes, como el peligro que representan los hipopótamos que los observaban desde la distancia. La tensión aumentaba al saber que un león estaba en las cercanías, lo que aportaba un elemento de riesgo a la filmación. «Aunque la escena se pactó con el animal más alejado y atado en sus patas traseras, la lucha con el látigo se rodó finalmente con la fiera libre», revela Streep. Así, la genuina reacción de temor de la actriz se convierte en parte integral de la narrativa, realzando la intensidad emocional de la escena.
Memorias de África se llevó a casa siete premios Oscar, incluyendo mejor película y mejor director, aunque curiosamente, tanto Streep como su coprotagonista, Klaus Maria Brandauer, no lograron obtener estatuillas. La película sigue siendo un hito en la historia del cine. Pero, pesar del éxito, Streep no iba a ser elegida como actriz, en parte debido a las dudas del director.
Pollack consideraba que Streep carecía del atractivo físico que requería el personaje de Karen Blixen. Esto se debió a que el director tenía una visión bastante clara de lo que quería para el papel, y creía que la actriz no encajaba con esa imagen. Sin embargo, Streep, decidida a demostrar su valía, llegó a la audición con una estrategia audaz: se presentó con un top muy corto que realzaba su figura y un sujetador que acentuaba sus pechos.