Fundado en 1910
Mario Marzo gana la segunda edición de 'Bake Off'

Mario Marzo gana la segunda edición de 'Bake Off'rtve

Mario Marzo gana 'Bake Off' con un homenaje a su familia: «Son la suerte de mi vida»

El actor y 'podcaster' realizó tres tartas en la prueba final recordando a sus padres, su mujer y sus hijos

Llegaba el momento en el que Pol Espargaró, Nagore Robles, Lidia Torrent y Mario Marzo se enfrentaran por alzarse como vencedor de la segunda edición de Bake Off: Famosos al horno en La 1.

Tres pruebas fueron las necesarias para elegir al ganador, que obtendría 100.000 euros para donar a la ONG que quisiera

Antes de entrar a la carpa, los cuatro concursantes comentaban que era «su gran día». Una vez allí, los jueces del talent de repostería Eva Arguiñano, Paco Roncero y Damián Betular les esperaban para presentarles la primera elaboración de tres petit gateau.

Sin embargo, hubo que esperar hasta la segunda prueba para conocer al primer eliminado de la noche. Los participantes en la final deberían elaborar un macaron gigante, como una tarta, acompañado de otros tres pequeños. En el caso de Pol, los pequeños detalles lo condenaron. El suyo acabó «un poco pasado de cocción», cayendo al cuarto puesto de la edición.

Un homenaje a su familia

Con el tercer cocinado de la noche llegó el ansiado desenlace. Lidia, Nagore y Mario debían realizar tres tartas con bizcochos de sabores que representaran «momentos vitales» de su vida. Tras tres horas de cocinado y pese a sus tropiezos, el jurado había fallado.

Las de Nagore estaban «increíbles» pero no pudo terminar su decoración. En el caso de Lidia, las calificaron como «simples pero bien ejecutadas». Por último, la «gran presencia» de los postres de Mario le sirvieron para ganar la segunda edición de Bake Off.

Con sus tres elaboraciones, homenajeó a toda su familia. La primera, una tarta «de cuatro texturas de chocolate», en referencia a una infancia en la que «aborrecía» el dulce. «He vivido en una familia donde se reían en alto, donde se decía 'te quiero' todos los días (...) Mi padre y mi madre nos pusieron a nosotros por delante de cualquier cosa», exponía.

La segunda, un bizcocho de arándanos, una mezcla entre los postres favoritos de Mario y su mujer, a quien conoció con 18 años al entrar en el conservatorio. «Es a quien más quiero en este mundo. Yo puedo ser muy gruñón, muy cascarrabias a veces y ella solo sabe reír. Es una suerte», comentaba.

«Y hablando de suerte», presentaba su tercer pastel, una réplica de la tarta del segundo cumpleaños de sus dos hijos mellizos. «Son la suerte de mi vida», añadía.

«Ha sido un día dificilísimo, me he notado que siempre iba cuesta arriba. Las veía a ellas que son buenísimas…», reconocía al recoger el trofeo. Eligió como destino del dinero tanto a la Fundación Aladina, «que acompaña, ayuda y hace felices a los niños que están pasando por un cáncer» como la Asociación Autismo España, de quienes resaltaba su gran labor por todo el país.

comentarios
tracking