«Se acabó escribir así»: Un youtuber trata de prohibir el lenguaje inclusivo
Inocente Duke, que ya se cambió de sexo para mostrar el absurdo de la Ley Trans, ha asegurado haber registrado el lenguaje inclusivo con su nueva obra Diccionarie: glosario completo del lenguaje inclusivo, y pretende cobrar a quien trate de usarlo
¿«Todes» o «ningune»? ¿Quién podrá usar el lenguaje inclusivo? Estos términos impostados, que tan de moda están en los círculos progresistas, ya no se podrán utilizar «con ánimo de lucro, con fines publicitarios, propagandísticos o políticos, ni tampoco en los medios de comunicación, a no ser que vaya bien entrecomillado y citando a su respectiva autora, que soy yo», ha explicado el youtuber Inocente Duke.
Este streamer, que viene generando controversia en los últimos tiempos por su «cambio de sexo» y por sus declaraciones acerca de la Ley Trans –ha demostrado lo sencillo que es para cualquier hombre «ser mujer»–, dice haber registrado los derechos del uso del lenguaje inclusivo en su libro Diccionarie: glosario completo del lenguaje inclusivo.
Con el registro de los derechos de este lenguaje se abre el interrogante de si Duke puede prohibir su uso, como él afirma en el vídeo, en el que también asegura que si se delinque contra los derechos de propiedad intelectual podría ir por la vía penal.
La respuesta inmediata es que no: las palabras de cualquier lenguaje no pueden pertenecer a un propietario. Para verlo desde otra perspectiva, es como si la RAE pudiera prohibir el uso de las palabras que ha registrado en su diccionario. Además, Inocente Duke ni siquiera es el creador de las palabras, ya que simplemente las ha registrado en un libro. El derecho de autor no le otorga la exclusividad de las palabras.
¿Se acabó escribir así?
«Se acabó escribir así, se acabó», finaliza el vídeo, después de animar a sus seguidores a pasarle fotos o capturas de pantalla donde se utilicen este lenguaje sin su consentimiento para una posible denuncia. Para ello, ha redactado un glosario completo de términos en español que promueven la inclusión y que «no existían», y lo ha registrado bajo propiedad intelectual.
Inocente Duke ha afirmado que los youtubers que utilizan el lenguaje inclusivo de manera despectiva y que son denunciados o perseguidos, sí tienen su permiso para utilizar este lenguaje. Asimismo, ha destacado que este lenguaje pertenece a todas las personas que sufren amenazas, extorsiones y chantajes.
En realidad, las acciones de Inocente Duke son un acto de rebeldía y de denuncia contra las nuevas leyes propuestas por Irene Montero. Así, decidió cambiarse de sexo para demostrar lo absurdo del proceso. «Irónicamente, lo que ha hecho la Ley Trans es ayudar a los hombres», afirma el influencer que lleva años denunciando las leyes de género a través de los vídeos que cuelga en su canal. Gracias, en este caso, a la ley madrileña, Javier Rodríguez es ya una mujer cuyo nombre prefiere reservar hasta que logre sacar a la luz el documental que ya está grabando sobre este asunto.