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Portada de «Teatro revolucionario. Historia del Teatro Español Universitario (TEU) en un Colegio Mayor» de José Manuel Varela (ed.)

Portada de «Teatro revolucionario. Historia del Teatro Español Universitario (TEU) en un Colegio Mayor» de José Manuel Varela (ed.)CEU Ediciones

'Teatro revolucionario': vanguardia teatral en el Colegio Mayor Universitario de San Pablo

A través de un estudio académico y dos testimonios de protagonistas, José Manuel Varela (ed.) presenta una interesante aportación del fenómeno del Teatro Español Universitario (TEU), semillero del teatro y la cinematografía española de la segunda mitad del siglo XX

El teatro ha jugado tradicionalmente un papel fundamental en la vida intelectual y cultural de las sociedades a lo largo de los siglos. En las antiguas póleis griegas, el teatro estaba íntimamente entrelazado con el ámbito religioso, y también con el concepto de ciudadanía. A lo largo de los siglos, el teatro ha sido sinónimo de encuentro, de reunión de la comunidad, de expresión de lo inexpresable. Hasta estos días oscuros, esta época «tiktokniana», ha llegado, incólume, el teatro, orgulloso y sin doblegar, con más de dos mil años de historia, con Esquilo y Aristófanes al frente, con Lope y Calderón, con Shakespeare y Molière. Aún puede uno ir al Teatro de la Villa de Madrid, o Fernán Gómez, por ejemplo, a emocionarse con una buena representación de El rey Lear, o a reírse a carcajada limpia con Los habitantes de la casa deshabitada. Pero el teatro no solo ha formado parte del ámbito «civil», por así decirlo, sino que se ha integrado también secularmente en otro ámbito que no podía sino ser hermano: el de la educación. La Universidad y el teatro han estado profundamente imbricados desde hace siglos, y dentro de la primera, el teatro ha tenido un semillero fecundo en los Colegios Mayores.

Así lo afirma José Manuel Varela Olea, editor y coautor de la reciente publicación titulada Teatro revolucionario. Historia del Teatro Español Universitario (TEU) en un Colegio Mayor: «Lo cierto es que la relación entre Literatura y [Colegios] Mayores era expresa […]. Si bien las primitivas Constituciones de los Mayores nunca contemplaron la posibilidad de asistencia a este género dramático, su evidente proliferación lleva a que sean contemplados y permitidos […]. Consecuencia lógica es que el teatro entre en los propios Mayores, y sean los propios residentes quienes deseen poner en marcha ciertas representaciones».

Portada de «Teatro revolucionario. Historia del Teatro Español Universitario (TEU) en un Colegio Mayor» de José Manuel Varela (ed.)

ceu ediciones / 163 págs.

Teatro revolucionario

José Manuel Varela Olea (ed.)

Es inevitable, cuando se habla del teatro universitario español, mencionar la Residencia de Estudiantes y La Barraca, y así lo hace convenientemente Varela Olea. La Residencia, como «ideal lejano de Colegio Mayor», nacida «a imitación de Colleges británicos», será el escenario de creación de la agrupación teatral, como señala Varela Olea: «Punto de inflexión en esta relación es la creación de La Barraca, un teatro universitario dirigido por uno de sus residentes: Federico García Lorca».

Pero Varela Olea también menciona otras organizaciones universitarias teatrales pioneras más desconocidas, como La Tarumba, nacida en la ciudad de Murcia, uno de los gérmenes del protagonista de este volumen: el TEU. Tras la guerra es, sin duda, el momento de mayor desarrollo para el TEU, o mejor dicho, los «TEUs», que habían empezado a aflorar al poco de concluir la contienda fratricida. A este respecto, señala Varela Olea que «de una forma más literaria que técnica, a finales de los años cincuenta, se entiende el TEU como «la versión universitaria del teatro, la interpretación universitaria de un modo de ver la vida, de un hombre hecho dentro de una vida hecha», o al menos, así es definido por quienes oficialmente lo proyectan», señala Varela, quien poco después se adentra en lo que denomina «Cuatro décadas fecundas» de Teatro Español Universitario, para concluir con «El Teatro en el Mayor de San Pablo», donde aparecen nombres de la categoría de Torrente Ballester o José Isbert.

Esta última parte que Varela Olea dedica al TEU en el Mayor de San Pablo hace de íncipit ideal para introducir el testimonio de uno de los protagonistas indiscutibles del volumen, además de coautor, José María Fibla Foix, abogado, pintor y director del TEU en el San Pablo durante la década de los sesenta. A modo de entrevista, Fibla Foix realiza una remembranza del TEU del Mayor San Pablo, su origen, su desarrollo, la organización… «Podría decirse que la organización del TEU de nuestra generación fue progresiva», señala Fibla Foix, pero pronto comienzan a surgir nombres importantes para la organización teatral, como los de Paco Forteza o Jacobo Cano. Más adelante Fibla Foix se adentra en cuestiones tan interesantes como las obras más señaladas representadas entre los muros del Mayor San Pablo o los actores que pasaron por su TEU, donde destacan Fernando Vivanco y Carmen Maura. Otras muchas cuestiones aborda Fibla Foix desde la experimentada voz de quien ha vivido los hechos.

Por último, el breve volumen se cierra con la aportación de Baltasar Magro Santana, periodista y escritor, centrada en el Teatro de Vanguardia en el San Pablo entre los años 1971 y 1974, también desde la perspectiva del testimonio, pues Magro Santana participó en el TEU del Mayor San Pablo como colegial desde su ingreso en el curso 1970-1971. De entre los montajes teatrales, Magro Santana hace hincapié en sus recuerdos en torno a dos: Historias del Zoo y Fuenteovejuna.

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