45º aniversario
«Elvis ha dejado el edificio»: el último concierto del Rey
Se cumplen 45 años de la última vez que Elvis Presley se subía a un escenario, fue en Indiana y apenas mes y medio antes de su muerte
Aquel 26 de junio de 1977, el Elvis que se subía al escenario del Market Square Arena de Indianápolis apenas era una sombra del Rey del Rock. Pero un simple destello de su sobrecargado traje todavía era sinónimo de carisma, magia y pasión musical. Por eso, aquel último espectáculo atrajo a casi 20.000 personas que no sabían que presenciaban un momento históricamente trágico.
La gira de 1977 estuvo marcada por la decadencia de un gigante. Elvis Presley sufría por su sobrepeso, los problemas en su vida privada y los excesos con las drogas y los medicamentos. Sus productores grabaron algunos conciertos y los publicaron después de su muerte... era la hora de exprimir el mito.
A pesar de todo, ese material contiene joyas como el Unchained Melody de un Rey agotado que se encuentra fácilmente en YouTube con la descripción de «la última canción de Elvis», aunque no lo sea.
Que lejos queda ese ajado Elvis al piano del arrollador personaje que en 1968 se enfundó un traje de cuero negro para su icónico Comeback Special. O de aquel que en 1973, en Hawaii, lucía imponente ese atuendo blanco con pedrería dorada que todavía baila en algunos salpicaderos. Y, sin embargo, aún hay algo en él que lo hace magnético.
La despedida
Volvamos a aquel 26 de junio en el Market Square Arena de Indianápolis. A eso de las 20:30, Elvis Presley arrancaba su último concierto con la canción See See Rider. El público enloquecía y el Rey se afana en demostrar que seguía en la brecha con clásicos como Jailhouse Rock, era el momento de mover las caderas como solo él sabía hacerlo.
El espectáculo avanzaba y las sombras del mito también se dejaban notar. Elvis necesitó tirar de chuleta para cumplir con Bridge Over Troubled Water , canción que formó parte de su repertorio durante años y cuya letra dice tanto en un momento como aquel.
Y así, llegamos al momento del adiós. Presley presentó a toda su banda e incluso subió a su padre al escenario. Era la última vez que el Rey reunía y reconocía a su corte. Para terminar, un himno: Can’t Help Falling In Love. Canción de amor que habla de un río que «fluye con certeza hacia el mar», la misma metáfora usada por Jorge Manrique en las Coplas por la muerte de su padre, cosas de la vida.
Aquella sí fue su última canción sobre un escenario. Después, las notas de Así habló Zaratustra acompañaron la salida, casi a hurtadillas, de Elvis Presley. A los pocos minutos, una voz por megafonía anunciaba a los espectadores de Indiana: «Elvis has left the building!» (Elvis ha dejado el edificio).
Después de aquel concierto comenzó una dramática cuenta atrás que se detuvo el 16 de agosto de 1977. Ese día, y a los 42 años, Elvis Presley murió en Graceland, su mansión de Memphis. Cuentan que poco antes de caer desplomado en el baño, el Rey se sentó al piano para tocar Blue eyes crying in the rain. Muchos ojos lloraron en todo el mundo aquella noche de verano.