Las 5 claves que dan la razón a Carlo Ancelotti y no a Zinedine Zidane
El Real Madrid lidera la clasificación de LaLiga Santander. Lo hace en solitario y gracias al acierto en el campo y en el banquillo
Zidane vivió las mieles del éxito con tres Champions consecutivas y Ancelotti, de momento, desmonta el mito de que segundas partes nunca fueron buenas. Pero, ¿cuáles son los aciertos del italiano que hacen que en el Santiago Bernabéu no echen, por el momento, de menos al francés?
Vinicius
Ancelotti, al igual que Florentino Pérez, lo tuvo claro desde el principio: Vinicius no se vende. El brasileño se siente indiscutible en el once titular y agradece la confianza de su técnico a base de goles y jugadas de peligro. Acumula en siete jornadas más tantos que en toda la temporada pasada y se ha convertido en la sensación de la competición. Zidane, por su parte, nunca confió en él al 100 % y siempre era el primero de sus cambios.
Gareth Bale
Tras la polémica salida después de su famosa declaración de intenciones de «Gales, Golf, Madrid», y su cesión en el Tottenham, Gareth Bale volvía al Real Madrid con el fin de cumplir su último año de contrato. El galés se convertía en otro reto para el italiano. Sin embargo Ancelotti, lejos de dejar de contar con él como hizo Zizou, se ha empeñado en intentar recuperar al ‘expreso’ de Gales. Durante las primeras jornadas ha sido uno de los más destacados. Sin embargo, el ansia por jugar con su selección le va a tener en el dique seco entre ocho y diez semanas.
Los cambios
Zinedine Zidane era algo tardío en hacer sustituciones. Raro era el partido en el que obligaba a sacar la tablilla al cuarto árbitro antes del minuto 70 o 75. Ancelotti, como se vio ante el Valencia o Villarreal, tiene claro que si algo no funciona, hay que cambiarlo. Y cuanto antes mejor. Carletto, en Mestalla, no dudó tirar de Isco, Camavinga, Rodrigo o Jovic para remontar el partido. La primera de las sustituciones la hizo en el minuto 65. Veinte minutos más tarde su equipo anotó el doblete que le llevó a dar la vuelta al resultado y ganar el partido.
Preparación física
Entre los numerosos éxitos de Zidane con el conjunto madridista no se puede decir que levantara el trofeo a la mejor preparación física. Bajo su mandato, el equipo acumuló un total de 61 bajas entre lesiones y positivos por Covid. Uno de los más señalados fue el preparador físico Grégory Dupont, petición expresa de Zinedine Zidane.
Hoy, con Carlo Ancelotti en el banquillo, Antonio Pintus vuelve a tener barra libre en el aspecto físico. Uno de los artífices del buen hacer del Madrid de la primera etapa del italiano vuelve como el hijo pródigo. Un ejemplo del buen tono físico de los blancos es que de los 21 goles conseguidos hasta la fecha, 17 han llegado tras el descanso.
Veteranos y noveles
Con Zidane debutaron hasta trece canteranos, entre los que destacan nombres como Sergio Arribas, Achraf, Mariano o Miguel Gutiérrez. Sin embargo, ninguno de ellos adquirió el protagonismo deseado. Es más, a la hora de apostar por ellos, algunos de los que debutaron salieron de la Casa Blanca en busca de minutos, como Achraf y, ante la opción de recuperarlos, el francés fue partidario de que no volvieran a Chamartín y hoy explotan su calidad fuera de España.
Ancelotti, desde su llegada, apostó fuerte por jóvenes talentos de la Fábrica como Antonio Blanco o el propio Miguel Gutiérrez. El joven zurdo reconvertido a lateral está causando sensación en este inicio de campaña debido a las lesiones de Mendy y Marcelo, convirtiéndose en un fijo para el técnico italiano. Otros jóvenes como Antonio Blanco o el propio Arribas están contando con minutos en la primera plantilla y están demostrando lo capacitados que están para formar parte del primer equipo.
Otro caso similar ocurre con los fichajes de futuro. El galo era más partidario de apostar por el grupo de los veteranos en vez de por las estrellas emergentes. Así, jugadores como Dani Ceballos tuvieron que emigrar. Sin embargo, Ancelotti combina en el campo savia joven como Camavinga e históricos veteranos como Modric o Kroos, haciendo caso al lema blanco de «veteranos y noveles».