¿Podemos seguir creyendo en Fernando Alonso?

Es turno de 'La Misión'. Tras el fiasco de 'El Plan', con un paso traumático por Alpine, especialmente la segunda temporada, Fernando Alonso afronta en 2023 el más difícil todavía: con 41 años afronta un nuevo reto en Aston Martin.

Fernando tiene un sueño que a veces se confunde con objetivo pero que no deja de ser algo improbable: volver a proclamarse campeón del mundo. No solo es el sueño de Alonso sino el de todo un país que se aficionó a un deporte por la figura del asturiano. Hay aficionados que darían mucho de sus vidas por ver a Fernando ganar un Mundial. O una carrera. Por verle ganar algo.

Magic sigue y no solo sus fans le reconocen su nivel: otros pilotos, directores técnicos y profesionales hablan de que está (o estaba, en referencia a la última temporada) en un gran momento de forma, que su pilotaje sigue siendo muy bueno. Y es que Fernando Alonso es capaz de encontrar los límites donde nadie los ve y todo ello a sus 41 años.

Al igual que con el equipo Alpine y la nueva regulación aerodinámica de 2023, la primera temporada en Aston Martin tiene el objetivo de intentar convertirse en el mejor coche tras Red Bull, Ferrari y Mercedes, un mérito que les colocaría como 'los mejores del resto'. Eso sería todo un éxito para un equipo, el nuevo de Alonso, que el año pasado fue noveno de los diez que había.

La evolución del monoplaza, para soñar con el Mundial, llegará en 2024 con la creación de la nueva fábrica de última generación del equipo de Silverstone y el nuevo túnel de viento, esencial en la aerodinámica de la Fórmula 1 hoy en día. Sin embargo, los 'alonsistas' no deben despegar los pies de la tierra, ya que la Fórmula 1 es un deporte muy complejo y difícil de prever, en el que muchas veces las promesas se las lleva el viento.

Fernando sigue siendo 'Magic'

El actual nivel de pilotaje de Fernando deja evidencias de que sigue en plena forma para pelear en pista con cualquier otro piloto. Solo falta por saber si Aston Martin estará a la altura de un piloto, dos veces campeón del mundo, con ganas de ser tricampeón. En la Fórmula 1 el coche aporta mucho más que el piloto.

Jenson Button, campeón del mundo en 2009 ycompañero de Fernando Alonso en su segunda etapa en McLaren-Honda, dejó clara una idea que se repite en la Fórmula 1 actual: Fernando «aún está en su mejor momento a los 41 años, todavía es un gran talento y tiene mucha pasión y amor por este deporte». Los elogios llegan de todos lados.

Además de la segunda posición en la clasificación del GP de Canadá de 2022, un claro ejemplo de su gran nivel de pilotaje fue la remontada en Austin tras el accidente con Lance Stroll, ahora compañero en Aston Martin, donde su monoplaza salió volando tras un choque y tras el que el asturiano fue capaz de mantener en pista el coche. Tras reparar los daños en la parada en boxes, Alonso logró una épica remontada hasta la séptima posición con la que recibió numerosos halagos ya que muchos pilotos retirarían su coche volviendo a boxes o no serían capaces de superar sus propios miedos tras semejante susto al volante del Alpine.

El físico no es un problema

Uno de los aspectos más importantes para subirse a un F1 es el físico del piloto, ya que se tratan de los coches físicamente más exigentes. Fernando se prepara a conciencia físicamente, ya que lo considera tanto esencial para subirse a un monoplaza así como para mantener un buen nivel sobre este.

El problema del porpoising fue un rompecabezas para muchos equipos y pilotos. Además, la FIA puede intervenir para evitar problemas de salud a largo plazo en los pilotos, como se pudo comprobar en el GP de Bakú con las quejas de Lewis Hamilton o Daniel Ricciardo, doloridos al final de las sesiones. En cambio Fernando ni se lo tomó mal: «Espero que hagan algo para los más jóvenes. Yo puedo aguantar unos años más», afirmó Fernando, haciendo ver que estaba físicamente preparado para todo.

El tirón mediático

Fernando Alonso es la gran figura mediática de la Fórmula 1 en España gracias a las grandes gestas que cosechó hace ya algunos años. Magic fue el culpable de despertar a miles de aficionados un domingo a las siete de la mañana, algo impensable hasta entonces. Sus dos títulos mundiales le pusieron en el olimpo de la Fórmula 1, siendo el campeón más joven de la historia por aquel entonces, y en la historia del deporte español como uno de los mejores deportistas de nuestro país.

Tras su retirada y vuelta a la F1 consiguió volver a despertar la ilusión de la afición española con 'El Plan', una campaña que tenía para proclamarse campeón del mundo con Alpine. Además, su vuelta junto con el fichaje de Sainz por Ferrari provocaron el aforo completo durante el GP de España 2022, consiguiendo el récord de asistencia en Montmeló. Alonso es historia de este país, arrastra a miles de personas a su lado. Es difícil no creer en su nuevo proyecto.

Malas experiencias cambios de equipo

El gran problema que ha acompañado a Alonso en su carrera ha sido la elección de escudería. Las pasadas experiencias del Nano provocan dudas ya que en numerosas ocasiones los cambios de equipo, pensando que iban a mejor, fueron a peor, obteniendo resultados nefastos y algunos de los episodios más negros de Alonso en la Fórmula 1.

Tras una aventura que no salió bien en McLaren Mercedes en 2007, el asturiano volvió a Renault, el equipo con el que se proclamó bicampeón del mundo. La temporada 2008 protagonizaría el famoso crashgate con su victoria en Singapur, sin embargo terminaría siendo 5º en el mundial de pilotos. Su segundo año en la nueva etapa con el equipo francés, no logró nada significativo siendo 9º en el mundial, debido al monoplaza poco competitivo que pilotaba.

Tras cinco años en la escudería Ferrari, logró ser subcampeón en tres ocasiones, pero el rendimiento del Cavallino Rampante no era el esperado. Se quedó a muy poco de ganar dos Mundiales. Apostó después por McLaren, años perdidos. Alonso sufría entonces por estar entre los 10 mejores pilotos de la parrilla. En la general de 2015 cosechó un 15º puesto, un 10º en 2016, otro 15º en el año 2017 y un 11º en su última temporada en 2018.

Motivación ilimitada

Tras dos años fuera regresó en 2021. Y la expectación fue tremenda. De nuevo la alonsomanía, la ilusión y la creencia de que se podía lograr algo grande. Hubo un podio en Qatar que avanzó 'El Plan' para 2022. Pero no hubo nada. Al contrario, la pasada temporada fue una época triste con enfrentamientos en el propio equipo y con situaciones frustrantes.

Sin embargo Fernando Alonso no pierde la motivación. Esa sigue intacta. O incluso va a más. Es una fuente de lucha ilimitada y por ello recibe los elogios de numerosos personajes del gran circo de la Fórmula 1. De ahí que a este deporte siga frotándose las manos teniendo al español en la parrilla.

Aunque haya un 1 % de opciones Fernando tendrá a la España deportiva estará detrás empujándole

«Mientras haya solo un 1 % de posibilidades de ganar el título nuevamente seguiré adelante», dijo hace pocas fechas Fernando Alonso. Pues si lo dice él... hay que creer. Aunque haya un 1 % de opciones Fernando tendrá a la España deportiva estará detrás empujándole.