Cañizares desvela cómo los futbolistas escapan los controles antidoping: «Parte médico: sobrecarga»
El exportero puso en duda la veracidad del parte médico del Atlético y comentó trucos usados por los médicos para evitar controles antidoping
El pasado domingo tuvo lugar la remontada (3-2) del Atlético Madrid frente al Cádiz, gracias a dos goles del argentino Ángel Correa, que disputó los 90 minutos y fue esencial en la victoria del conjunto de Diego Pablo Simeone. Al término del encuentro, tuvo lugar el Tertulión de Tiempo de Juego de la Cadena COPE, donde se analiza la jornada liguera.
En esa tertulia, donde estaban presentes, entre otros, Antonio Ruiz, Paco González y el exjugador Santi Cañizares, se puso el foco en la remontada del Atlético y la importancia de Correa en la misma, tan solo una semana después de la entrada de Jude Bellingham que le provocó una lesión al argentino.
Durante el transcurso del programa, Cañizares puso en duda la veracidad del parte médico que había ofrecido el Atlético Madrid, donde se afirmaba que Correa padecía un esguince de rodilla de grado I. De acuerdo con el exportero del Valencia, la recuperación había sido demasiado rápida y ponía en duda la veracidad del diagnóstico.
Sirviéndose de una anécdota personal, Cañizares dijo que en ocasiones los médicos se inventaban los partes de los jugadores, diciendo que estaban aquejados de una lesión leve como una sobrecarga, de cara a evitar los controles antidoping si eran conscientes de que, por error, los propios médicos habían ofrecido al jugador medicamentos con componentes de doping.
El propio Cañizares también observó en esa tertulia que «después de varios años en equipos de fútbol, te diría que los médicos están entre el grupo de más mentirosos que hay en el fútbol».
Estas declaraciones aumentan más la polémica en torno a la supuesta lesión de Correa, con varias posturas enfrentadas respecto al grado de veracidad que tuvo el parte médico emitido por el Atlético Madrid en el que se establecía que el argentino quedó lesionado debido a la entrada de Bellingham.