UEFA y Gobierno de Francia fueron «irresponsables y negligentes» en los sucesos de la final de la Champions

La UEFA, casi nueve meses después de la final de la Champions League en París, reconoce ya de forma definitiva que las escenas de tensión, los robos en los aledaños del estadio y la violencia que se vivió en los momentos previos a aquella final fue su culpa y la del Gobierno francés. «Fue un desastre», dice el informe independiente sobre los incidentes ocurridos en París, encargado por la UEFA y que ahora acepta la propia UEFA.

Ni los aficionados del Liverpool ni los del Real Madrid tuvieron la culpa de los graves sucesos que ocurrieron el pasado 29 de mayo. Hubo negligencia de las autoridades francesas y los hinchas fueron expuestos a un gran peligro físico y todos los responsables cometieron errores. Incluso pudo haber muertes, señala un informe que es durísimo con lo hecho por la UEFA y el Gobierno francés antes y después de la final. La organización se basó en una «ausencia de control general o supervisión de la seguridad», dicen.

Esa comisión, compuesta de expertos, universitarios, juristas y representantes de asociaciones de aficionados, considera que la UEFA y las autoridades francesas cometieron errores de bulto y que ambas, junto a la Federación Francesa de Fútbol y varios ministros, «actuaron de forma irresponsable» al «negar su responsabilidad». Esta es una de las claves. Los organizadores de la última final de Champions acusaron a los aficionados –especialmente a los del Liverpool– de ser los causantes de los graves problemas que hubo.

Señala esta comisión que la seguridad del Estadio de Francia, situado en la comuna parisina de Saint-Denis, pretendía evitar un enfrentamiento entre ambas aficiones, «un riego irreal» ya que la mayoría de los aficionados eran pacíficos. Sin embargo, continúan, «se olvidaron de afrontar los peligros que suponía la delincuencia» que tradicionalmente sufren los seguidores en Francia y, especialmente, en Saint-Denis.

El informe desmiente también al ministro del Interior francés, Gérald Darmanin, que habló de «fraude masivo» de entradas. El informe llama «irresponsable» al miembro del Gobierno de Macron. Además, considera que haber dado demasiada importancia a ese fenómeno llevó a instalar puntos de filtrado de aficionados demasiado estrechos, lo que les exponía a ser víctimas de avalancha.

La UEFA, que encargó este informe, promete «aprender» de lo sucedido en la capital francesa y pide disculpas a aficionados de Real Madrid y Liverpool. Además especifica que anunciará por separado un plan especial de reembolso para los aficionados.