El Madrid tomó Anfield

Me dio esa impresión. Que fue un ensayo muy general pensando en febrero, la Champions o sea. Campazo. Noventa minutos sin cosas raras. Ahora tú, ahora yo. Un rival ‘honrao’ por noble y competidor, siempre en plan venga-venga hasta que le apuntilló Toni Kroos, muy al final.

La historia hizo los dos golazos del Madrid. Benzema y el alemán. Que fue suplente, también Modric: vean la pelota que inventa entre tres rivales en el origen del 0-2, tras un saque de banda. La prueba de los jóvenes le funcionó a Ancelotti, mayormente Camavinga: cum laude.

No me sorprendió Carletto, debía mojarse, tomar decisiones y lo hizo. Esperaba a los tres, Valverde, Camavinga y Ceballos, porque están muy bien. Y el que está bien, juega. Dudaba entre Asensio y Kroos. La irrupción de Marco en Villarreal fue determinante.

El fútbol es también un juego de momentos. El del Madrid ahora pasa por ellos. Y hay mil partidos. De momento, el jueves, el Atleti. Y el domingo, la Real. Como para andarse con dudas.

Fue un buen Madrid y un estupendo Athletic, que se diferencia del Liverpool en que este tiene gol, aunque precisamente este año menos. El equipo de Valverde lo hizo todo menos marcar. Es su cruz. Eso le supuso al Madrid otra alegría: la puerta a cero. Apenas despistes. Puede que sea el influjo de Nacho. Los denostados Rudiger y Mendy no enloquecieron.

Es curioso. Desde el descanso del otro día en La Cerámica, el Madrid ha ganado 0-5 a Villareal y Athletic. Pasan los años y Lázaro sigue levantándose.