La historia de nunca acabar de Ansu Fati: de ser el heredero de Messi a que el Barça le invite a irse

Mucho han cambiado las cosas desde aquel 25 de agosto de 2019. Ese día, que queda ya muy atrás, se produjo el debut oficial de Ansu Fati con la elástica blaugrana. El Camp Nou asistió al nacimiento de una nueva estrella, a la que llegaron a bautizar como el 'nuevo Messi'. Y fue el del extremo fue un debut histórico, ya que se convirtió en el segundo jugador más joven de la historia del conjunto azulgrana en debutar con el primer equipo en liga.

La expectación en torno a la figura de Ansu Fati era máxima. Se le veía como el jugador del futuro, como ese futbolista que iba a ser capaz de marcar diferencias. Talento tenía para regalar, pero la historia aconsejaba que había que ser muy paciente. Nunca es recomendable llenar de presión a un chaval con toda una carrera por delante.

El exceso de presión le acabó perjudicando. El tiempo se ha encargado de demostrar que el de Ansu ha sido uno de esos muchos casos que empezaron a lo grande y que han terminado en nada. Las constantes lesiones y el ser un jugador de cristal le ha acabado por crucificar. Ansu ha entrado en un bucle del que le está costando horrores salir. Resulta increíble que a un futbolista de tan solo 22 años le esté pasando algo así.

El futuro de Ansu Fati pende de un hilo. Es innegable que el extremo español no cuenta para Hansi Flick. El chico está en el ostracismo más absoluto y ya han sido varias las veces que el Barcelona le ha enseñado la puerta de salida. Los azulgrana necesitan aligerar masa salarial y desprenderse de Ansu le vendría de perlas. No es uno de los jugadores que más cobra de la plantilla, pero todo dinero que se pueda liberar mucho mejor para el club.

El problema es que Ansu está convencido de que aún puede triunfar en el Barça a pesar de la feroz competencia con la que cuenta. Pero ese exceso de cabezonería le está causando más problemas que soluciones. En estos momentos, el extremo nacido en Guinea Bissau tiene por delante a jugadores como Raphinha o Ferran Torres y Flick ya le ha dejado claro, de manera indirecta, todo hay que decirlo, que el chico no le inspira confianza.

En lo que va de temporada, Fati solo ha disputado ocho partidos, lo que se traduce en 182 minutos entre todas las competiciones. Es decir, la presencia del español en el once del Barcelona ha sido prácticamente testimonial. En circunstancias normales, otro futbolista ya habría hecho las maletas, pero Ansu está empeñado y confía plenamente en sus posibilidades. Cree que lo puede lograr. Solo le hace falta un punto extra de suerte, ya que las lesiones no le han dado tregua en estos últimos cinco años.

De hecho, se ha llegado a afirmar (siempre de modo coloquial), que Ansu se lesiona solo con respirar o pisar el césped. Por lo tanto, muchos se han empezado a preguntar qué hubiera pasado con el '10' barcelonista si las lesiones le hubieran respetado. Esa es una eterna pregunta que quedará ahí, ya que nunca lo sabremos.

Lo que sí conocemos es que Ansu tiene talento y que necesita esa pizca de suerte que le ha faltado en gran parte de su carrera. Si acaba saliendo del Barça (que es la opción más viable), lo mismo podríamos volver a ver el mejor fútbol del extremo hispano-guineano. La barrera que existe es que no hay demasiados candidatos.

Su experiencia fuera de España más reciente se produjo en Brighton. Ansu aterrizó en el sur de Inglaterra con ilusión y su fichaje levantó una gran expectación. Con la camiseta de las gaviotas disputó un total de 27 partidos, pero esa alegría inicial se acabó convirtiendo en indiferencia y el Brighton no se quedó con él.

¿Una cesión en la Liga española?

Así las cosas, el futuro de Ansu Fati podría estar dentro de nuestras fronteras. Y no precisamente en el Barcelona. Flick ya lo expresó en más de una ocasión: «Soy sincero con todos, he hablado con él. Es lo que él quiera. Le dije al llegar que está listo para ser profesional y mostrar un gran rendimiento. Se lesionó, pero tras la lesión no nos mostró su cien por cien. Y es una pena por él y por nosotros. No lo dio todo. Tiene que trabajar como todos y dar lo mejor. Es lo que queremos».

Una cesión es la opción más factible. Y en ese sentido, hay cuatro clubes que aparecen en el radar de Ansu Fati. Dadas sus características, el extremo español podría encajar en los esquemas del Betis, Girona, Sevilla o Valencia, los cuatro clubes que se han interesado por su situación en las últimas semanas.

El inconveniente es que en el entorno de Ansu las opiniones están divididas. Su núcleo profesional cree que con una cesión podría volver a recuperar el ritmo competitivo que le viene faltando todo este tiempo. No obstante, su familia considera que debe de quedarse en el Barça, ya que en algún momento tendrá la oportunidad de reivindicarse. Así está la situación de Ansu Fati, el futbolista que fue elegido como el heredero de Messi y que ahora está viviendo un cuento de nunca acabar.