Messi le regala el Mundial a Argentina
Era la final esperada por los jeques y fue mucho mejor de lo esperado. Y el campeón soñado. Qatar 2022 quedará en el recuerdo del fútbol como el Mundial de Messi, ese en el que el capitán de la Albiceleste igualó a Maradona, se coronó y postuló su candidatura a ser el mejor jugador de la historia. Ya no habrá más fantasmas ni más comparaciones con México 86. La Pulga ya ha hecho lo mismo, ya le ha regalado un Mundial a Argentina, como hizo Maradona.
Después de 63 partidos, llegaba el único que de verdad importa, el que dirimía el campeón. Y fue un espejismo durante 80 minutos, pero después se convirtió en una de las mejores finales que se recuerda en los Mundiales. Argentina salió a por el título ante una Francia desdibujada que parecía todavía afectada por el virus del camello. Les servirá de excusa, por lo menos, para un inicio tan nefasto.
La Albiceleste lo aprovechó. Y casi sin necesidad de tirar de Messi. Era mejor incluso sin su capitán, porque la de hoy poco se parecía a la Argentina de días atrás. Era un equipo, un bloque unido y no un conjunto de jugadores que buscaban a Messi una y otra vez. Quizás esta Argentina no mereció llegar a la final pero sí levantar la Copa.
Las sensaciones parecían claras desde el minuto 1 y el marcador reflejó pronto lo que se veía sobre el césped. Lo intentaron sin suerte De Paul, Julián Álvarez y Di María, que estaba destinado a ser protagonista. El de la Juve se internó en el área desde la banda izquierda y chocó con la pierna de Dembélé. Muy listo el argentino y muy torpe el del Barça. Penalti, uno más para la cuenta de Argentina, que bate el récord en los Mundiales. Y curiosamente todos discutibles.
Las miradas se dirigirán a la FIFA en los próximos días, como Messi puso la suya a la red cuando colocó el balón en el punto de penalti. 11 metros le separaban de la historia, de marcar su primer gol en una final de Mundial, porque en Brasil 2014 se marchó sin ver portería. Lloris se fue a la derecha y el balón a la izquierda. 1-0.
La final que se dibujaba como una pugna entre Messi y Mbappé, entre el maestro y el heredero, tenía claro ganador. O eso parecía. El argentino merecía un hueco en olimpo del fútbol y ya lo tiene con esta Copa. Mbappé ganó un Mundial con 19 años y podía haber igualado a Pelé. Messi, sin embargo, jugó con el apoyo de un país en la pierna derecha y el espíritu de una nación en la izquierda. La presión, esta vez, la dejó en casa porque no hacía falta. Esta vez había que ganar, aunque fuera en los penaltis.
Francia desconectó con el 1-0 –si es que se había conectado en algún momento– y Argentina se gustaba. Tocaba la pelota y mareaba al rival. Parecía Croacia o la Brasil de Pelé que jugaba como los ángeles. Parecía de todo menos Argentina. Desplegó su mejor fútbol en el partido más importante, como Francia estaba pinchando en el peor momento. Ni en la derrota contra Túnez jugaron peor.
Los bleus no eran capaces ni siquiera de imponer su físico, donde también venció Argentina. En el 35 montó una contra perfecta en cinco toques ante la que nada pudo hacer Francia. Mac Allister para Messi; Messi para Julián Álvarez; Julián Álvarez otra vez para Mac Allister; Mac Allister para Di María y Di María a la red. Todo al primer toque. Un golazo espectacular. 2-0 y partido cerrado. O eso parecía.
Mbappé al rescate
Si Argentina hubiera necesitado un 5-0 para que la FIFA le diese el título, lo habría hecho. Pero no quiso hacer sangre creyéndose campeona y lo pagó. Francia no se presentó hasta que restaban 10 minutos para el final. Kolo Muani entraba en carrera en el área y Otamendi lo derribó. Penalti claro que Mbappé ajustó al palo para reducir distancias. Había partido. Y tanto.
A los dos minutos, Coman le robó la bola a Messi en el centro del campo, salió en velocidad y se la dio a Mbappé, que tocó de cabeza para Thuram. Este se la devolvió y Mbappé se sacó de la manga una volea espectacular para igualar la final. En dos minutos. Esto es el fútbol.
A Argentina le volvía a pasar lo mismo que con Países Bajos. Del 2-0 a la prórroga cuando ya se veían levantando la Copa del Mundo. Mbappé demostró que por algo es el jugador que marcará la próxima generación y regaló 30 minutos más de fútbol. Francia había privado de 80 minutos de espectáculo y ahora quería compensarlo.
Emergió entonces Messi. Probó dos veces a Lloris pero el del Tottenham mantenía vivo a su equipo. Y a la tercera fue la vencida. Lloris rechazó un disparo de Lautaro y el capitán apareció para marcar el 3-2. Parecía que Koundé lo había salvado bajo palos, pero no. El balón había entrado. Messi había marcado. Argentina había marcado. El fantasma de Maradona había marcado.
El Dibu, clave
Y parecía todo hecho, pero el fútbol es maravilloso. Con Francia volcada al ataque, Montiel interceptó con el codo un tiro de Mbappé. Penalti. No le tembló el pulso al del PSG, que colocó la pelota a la izquierda, otra vez pegada al palo, para volver a igualar el partido y forzar los penaltis. Lo pudo evitar Kolo Muani en el último segundo, pero se estrelló con el Dibu Martínez.
Las dos estrellas tomaron primero la responsabilidad en los penaltis y no fallaron. Gol de Mbappé y gol de Messi. Paró después el Dibu el tiro de Koman y Dybala marcó. Tchouaméni la envió fuera y Paredes marcó. Kolo Muani marcó y Montiel agarró el balón sabiendo que si lo metía levantaría la Copa. Gol. Argentina campeona.
Messi llevó a la Albiceleste a la final y Messi la ganó. Era el último Mundial de su capitán y al fin pudo levantar el título. Se ha ganado que dejen de compararlo con Maradona, porque ya le ha dado a su país lo mismo que le dio aquel. Argentina ya es tricampeona y lo es gracias a Messi. La plaza del Obelisco ya se puede llenar otra vez.
Ficha técnica
3 (2) - Francia: Lloris; Koundé, Varane (Konate, m. 113), Upamecano, Theo Hernández (Camavinga, m. 71); Tchouameni, Rabiot (Fofana, m. 86); Griezmann (Coman, m. 71); Dembele (Marcus Thuram, m. 41), Giroud (Kolo Mouani, m. 41), Mbappe.
Goles: 1-0, m. 23: Messi, de penalti. 2-0, m. 35: Di María. 2-1, m. 80: Mbappe, de penalti. 2-2, m. 81: Mbappe. 3-2, m. 109: Messi. 3-3, m. 118: Mbappe, de penalti.
Penaltis: 0-1: Mbappe, gol. 1-1: Messi, gol. 1-1: Coman, para 'Dibu' Martínez. 2-1: Dybala, gol. 2-1: Tchouameni, fuera. 3-1: Paredes, gol. 3-2: Kolo Muani, gol. 4-2: Montiel, gol.
Árbitro: Szymon Marciniak (Polonia). Amonestó a los argentinos Enzo Fernández (m. 52+), Acuña (m. 97+), Paredes (m. 114), Montiel (m. 117) y 'Dibu' Martínez; y a los franceses Rabiot (m. 54), Marcus Thuram (m. 87) y Giroud (m. 93+, en el banquillo).