Fundado en 1910
Sinner posa con el trofeo de campeón del US Open

Sinner posa con el trofeo de campeón del US OpenEFE

Sinner conquista Nueva York y se proclama, junto a Alcaraz, como la nueva realeza del tenis

Jannik Sinner, joven prodigio italiano de 23 años, firmó su nombre en la historia al conquistar su primer Abierto de Estados Unidos, añadiendo así un segundo Grand Slam a su palmarés tras su triunfo en el Abierto de Australia. Con esta victoria, Sinner no solo demostró su valía en la pista, sino que también cerró el capítulo de una larga espera para Italia, que desde 2015, con la victoria de Flavia Pennetta, no había celebrado un triunfo en Flushing Meadows.

Sinner se impuso con autoridad ante el estadounidense Taylor Fritz, frustrando el sueño de un país que anhelaba un nuevo campeón local desde la última consagración de Andy Roddick en 2003. En un partido que duró poco más de dos horas, Sinner despachó a Fritz con un contundente 6-3, 6-4, 7-5, ante una multitud en el Arthur Ashe Stadium, repleta de estrellas del deporte y el espectáculo que esperaban presenciar un hito en la historia del tenis estadounidense.

Desde el primer set, Sinner mostró una solidez impresionante, a pesar de los nervios iniciales que afectaron a ambos jugadores. Fritz, que disputaba su primera final de Grand Slam, se vio rápidamente superado por la consistencia y la paciencia de su rival. A pesar de un amago de recuperación en el segundo set, el californiano no logró sostener el ritmo frenético del italiano, que se mostró implacable desde la línea de fondo, castigando cada error de Fritz con precisión quirúrgica.

La victoria de Sinner no solo le otorga un lugar en la cima del tenis mundial, sino que también marca un cambio de guardia en el deporte, confirmando que la nueva generación ha llegado para quedarse. Junto al español Carlos Alcaraz, con quien ha compartido los cuatro 'majors' de este año, Sinner se erige como una de las figuras que liderará el tenis masculino en los próximos años, en una era post 'Big Three' que ya se vislumbra en el horizonte.

Este triunfo en Nueva York llega en un momento crucial para Sinner, quien recientemente había estado bajo la sombra de la controversia tras un positivo en un control antidopaje en Indian Wells, un incidente que fue finalmente atribuido a un error de su fisioterapeuta y no resultó en sanción alguna. Este episodio, lejos de debilitar su moral, parece haber servido como catalizador para su determinación en la cancha, llevándolo a encadenar una racha de doce victorias consecutivas y seis títulos en lo que va del año.

Sinner en un punto durante el partido

Sinner en un punto durante el partidoEFE

Con este logro, Sinner se une a un selecto grupo de tenistas que han conseguido el doblete en los dos 'Grand Slam' de pista rápida en un mismo año, junto a leyendas como Novak Djokovic, Roger Federer y Mats Wilander. Su éxito en Flushing Meadows no solo refuerza su posición como número uno del mundo, sino que también asegura su liderazgo en el circuito al menos hasta la próxima temporada.

Mientras tanto, Fritz, que irrumpirá en el top ten del ranking ATP tras su desempeño en este torneo, deberá esperar otra oportunidad para convertirse en el héroe que Estados Unidos ha estado buscando durante más de dos décadas. A pesar de la presión y el peso de las expectativas, el estadounidense mostró destellos de su talento, pero se vio superado por un Sinner que, con una calma casi estoica, neutralizó cada intento de remontada con una serenidad propia de los grandes campeones.

El Arthur Ashe Stadium, epicentro del tenis mundial, fue testigo de una noche mágica para Italia y un tanto melancólica para el tenis estadounidense, que vio cómo, una vez más, el sueño de un nuevo campeón local se desvanecía en el último suspiro. Y así, con la raqueta en alto y la mirada fija en el futuro, Jannik Sinner confirmó que el relevo generacional no es ya una promesa, sino una realidad palpable y brillante.

Temas

comentarios
tracking