Curso político
Las medidas económicas de Pedro Sánchez para conseguir votos
La deriva económica de España solo se ha corregido cuando Europa ha tomado parte
A las puertas de un nuevo curso político, es necesario repasar las medidas económicas de Pedro Sánchez que buscan conseguir votos de cara a las elecciones de diciembre de 2023. Aunque queda más de un año para la cita electoral, el presidente del Gobierno utilizará todos los recursos a su alcance para mantenerse en la Moncloa y uno de ellos es el de la legislación en materia económica.
Eléctricas y bancos
Los últimos impuestos a las compañías eléctricas y a los bancos han despertado las críticas del sector mientras que desde el Gobierno se habla sin tapujos de limitar beneficios y, además, se llevan a cabo sin contar con la opinión de los implicados.
Otros de los puntos calientes es el transporte. La guerra en Ucrania ha disparado los precios del gas y la electricidad y eso ha llevado al gobierno a subvencionar el transporte público. El 100% de los abonos para Cercanías, Rodalies y Media Distancia del 1 de septiembre al 31 de diciembre. La medida supone un gasto extra de 200 millones de euros en un crédito solicitado por el ministerio.
La Educación también es un foco importante de votos. Mientras el Gobierno socialista y su ramo comunista manipula la ideología de los libros de texto, el reparto económico también es importante para la futura campaña.
El Gobierno aportará una beca de 100 euros desde septiembre a diciembre de 2022 para todos los jóvenes mayores de 16 años que ya estudien becados. Una medida que alcanzará a un millón y medio de alumnos. Esto se añade al Bono Cultural de Miquel Iceta que lleva meses perdido en trámites burocráticos y tramites electrónicos.
Sanidad
El hospital Isabel Zendal que Isabel Díaz Ayuso construyó en Madrid en plena pandemia fue objetivo de todo tipo de críticas desde la izquierda. Ahora, Pedro Sánchez ha anunciado un Centro Estatal de Salud Pública con el que se puedan gestionar las emergencias sanitarias. También anunció 1.000 millones de euros para mejorar la eficiencia energética en la salud pública.
Con la vivienda se pueden recaudar muchos votos. Pedro Sánchez lo sabe y se ha colgado la medalla de desbloquear la Operación Campamento en una de las ciudades donde menos popularidad tiene, Madrid. Unas 12.000 viviendas de las que más de la mitad serán públicas.
El bono vivienda se dotó con 250 euros mensuales destinado a los jóvenes de entre 18 y 35 años y con rentas inferiores a 23.725 euros para facilitar su emancipación
Políticas agrarias
El campo también es un buen lugar para recoger votos. El Gobierno ha propuesta nueva Política Agraria Común. También ofrece 1.000 millones de euros para adquirir placas solares, bombas de calor y vehículos eléctricos. Parte de este dinero llega directamente de los fondos europeos y el embudo en que se han estancado gracias a la burocracia de la administración es enorme.
A todas estas medidas que serán recordadas en los próximos meses se suman otras cuyos beneficios son dudosos y, en algunos casos, solo han traído problemas. Es el caso de la bonificación de los 20 céntimos por litro de gasolina que apenas supuso ahorro porque las gasolineras repercutían parte en el precio.
También el ingreso mínimo vital (IMV). La gran arma de la extrema izquierda para desgastar a los empresarios y que ya han conseguido llevar a 1.000 euros y se espera una próxima subida a 1.100.
Pensiones
Los jubilados son ese otro sector de la social con el Sánchez ha tenido serias dificultades para ofrecerles algo decente. El presidente sacó las pensiones del pacto de rentas para evitar el enfado de los pensionistas. El Gobierno aprobó un aumento del 15 % de las pensiones de jubilación no contributivas. Las revalorizaciones de la paguilla compensatoria ligadas al IPC no garantiza la sostenibilidad del sistema, pero será otro argumento electoral.