Hacienda exprime la salud económica en 272.000 millones y nadie queda fuera de sus sofisticadas armas
A través de su agencia especial, la Tributaria, se está convirtiendo en el laboratorio donde experimentar nuevas técnicas de recaudación cada vez más refinadas
Hacienda no somos todos. Hacienda es la cueva donde se planifica como explotar a todos los españoles y exprimirlos hasta que no les quede ni euro a final de cada mes, a las pymes, lo justo para pagar la Seguridad Social y a las grandes del IBEX para que todo lo extra que pagan pueden revertirlo en subidas de precios.
Hacienda, a través de su agencia especial, la Tributaria, se está convirtiendo en el laboratorio donde experimentar nuevas técnicas de recaudación cada vez más sofisticadas, para que se prueben nuevos impuestos y que nadie pueda escaparse, salvo para pasar a las cámaras de «nuevos impuestos» equivalentes a las de gas, donde la posibilidad de salir indemnes es imposible.
La maquinaria de información de que dispone Hacienda y los sistemas informáticos creados para garantizarse el 100% de la información de todas las empresas y todos los contribuyentes, se está sofisticando a tales niveles que Orwell nunca fue capaz de imaginar. Si Hitler, la Gestapo y las SS hubiesen contado con estas herramientas, hoy llevaríamos todos esvásticas en los brazos. Y los que no, estarían en los campos de concentración esperando a ser gaseados.
Hacienda ya no somos todos, tiene un amo, en este caso ama, que es capaz de cambiarle la vida a cualquiera que el Gran Ojo Montero quiera, pues después de lo que ha pasado con el novio de Ayuso, ninguno estamos libres de ser acusados, antes de poder defendernos, por la Gran Hermana Montero, que se ha arrogado el ser juez, parte, condenar y llevar a la cárcel, sin necesidad de que cualquier acusado pueda defenderse.
Ni Goebbels en sus mejores sueños pudo imaginar tener un arma tan potente, como la que tiene María Jesús Montero en sus manos, con capacidad para destrozar a quien quiera.
Hace unos días se publicaba un informe en el que el Gobierno estimaba que la economía sumergida o informal, se había ido reduciendo en los últimos años hasta quedar reducida al 15 % y, posiblemente, una de las razones es que cada vez se hace más difícil salirse del control del sistema. El temor y el miedo es cada vez mayor y el uso de la Inteligencia Artificial y los sistemas de computación actuales, unido al terror que genera la Inspección Tributaria y la capacidad para filtrar la información nos deja a los ciudadanos y a las pymes indemnes frente a la Administración.
En cualquier caso habrá que convivir con la espada de Damocles de la que dispone una administración que usa todas las armas que tiene en su favor y, por ende, en contra de los que no comulgan con sus ideas.
Después de esta disquisición conviene que les cuente hasta donde nos han exprimido en el 2023, con respecto a 2022, que fue un año histórico y que ha dejado de serlo ya, para que el histórico sea el 2023, con una recaudación de casi 272.000 millones, casi 16.500 millones más que el año anterior.
Veamos lo números:
El mes de diciembre ha sido espectacular, con una recaudación de 19.008 millones de euros, un 21,3 % más, 3.324 millones más que en diciembre del año pasado, en el que la recaudación llegó a 15.674 millones.
Los impuestos directos crecen en diciembre un 22,7 %, debido a que el IRPF recaudado sube un 11,5 %, pero el impuesto de sociedades sube un 45,9 %, hasta los 5.169 millones.
Los impuestos indirectos crecen un 15,6 %, debido al incremento del IVA, que estábamos todos convencidos que había llegado a su limite y en este mes se marca un crecimiento del 22,8 %.
Desde el punto de vista anual los impuestos directos suben un 10,1 %, dado que el IRPF llega a la cifra nunca antes recaudada de 120.000 millones y una subida del 9,9 %. Con el Impuesto de Sociedades pasa exactamente lo mismo, se va hasta los 35.060 millones, la mayor cifra de la época Sánchez y un crecimiento del 9,0 %, que ayudados por el crecimiento del resto de impuestos que lo hace un 27,5%, llegamos a la cifra de 159.751 millones.
En los indirectos, a pesar del gran mes de diciembre, la subida es del 1,7 %, debido a que el impuesto más importante, el IVA crece un 1,7 % y llega a 83.909 millones siendo el segundo impuesto más importante de los recaudados por la Agencia Tributaria. Los impuestos especiales crecen un 2,6 % y merecen un artículo propio.
Por último, las Tasas que bajan un 0,2 %, para llevar la recaudación a 271.935 millones, cifra nunca antes soñada por Montero y su tropa que supone un 6,4% más de exprimir a los españoles.