La UE en horas bajas: las exportaciones hasta julio caen 83.100 millones
El plan que sigue en marcha de dejar de producir en 2035 coches con motores de combustión ha sido como pegarse un tiro en el pie
Una de las claves del éxito de la Unión Europea ha sido siempre su capacidad exportadora, que producía unos enormes beneficios a todos los países al ser un factor importante en el crecimiento del PIB.
El PIB de la UE creció un simple 0,3 % en el primer trimestre del año, un 0,2% en el segundo trimestre, que sumados al 0,2 % del tercer trimestre del 2023 y el 0,1 % del cuarto, significan un 0,8 % de incremento en los últimos cuatro trimestres.
Aunque el gasto público está sosteniendo el PIB, pues crece en el mismo período un 2,1 %, el consumo de los hogares se está parando, la formación bruta de capital está totalmente frenada y cae en el último año un 6,2 %, y lo que en los malos momentos siempre aparecía, que eran las exportaciones, ahora realmente van de capa caída y no levantan cabeza.
Dentro de las exportaciones, uno de los grandes afectados es el sector del automóvil. El plan que sigue en marcha de dejar de producir en 2035 coches con motores de combustión ha sido como pegarse un tiro en el pie, a sabiendas que lo que teníamos entre manos era una escopeta de cartucho y nos lo hemos volado.
Los fabricantes europeos de automóviles habían conseguido tener los motores más eficientes del mundo en combustión de gasolina y de diésel, donde las emisiones de CO2 eran cada vez más reducidas y además llevaban décadas de ventajas al resto de fabricantes mundiales. Ahora tenemos a los chinos que van por delante de nosotros varios años en los motores eléctricos y que se lo hemos puesto en bandeja.
Si a la regulación de prohibir fabricar vehículos con motores de combustión para 2035, añadimos, la subida de costes salariales y la bajada de productividad en horas, nuestra industria ha entrado en una tormenta perfecta. Éramos líderes mundiales, con la competencia exclusiva de los japoneses y los coreanos, pero competíamos en régimen de igualdad con ellos, cosa que ahora no sucede y, lo que es peor, cada mes que pasa sin derogar la directiva colocamos en mayor dificultad al sector automovilístico europeo que anda completamente desnortado.
Esto provoca que en lugar de crecer, aunque fuese poco, nuestras exportaciones, lo que está pasando es que vamos perdiendo terreno, vamos exportando menos y nuestros competidores, que no están parados, nos van quitando negocio mes a mes y ya solo crecemos en el continente americano y fundamentalmente por que Estados Unidos siguen siendo nuestro mayor comprador, afortunadamente.
Y sino vean el cuadro que les he preparado y puedan observar lo que está pasando:
Las exportaciones totales de la Unión Europea, en estos 7 primeros meses del año, han llegado hasta los 2,384 billones de euros, que suponen haber caído un 3,4 % con respecto del mismo período del mes anterior y, por lo tanto, hemos exportado 83.103 millones menos que hace un año.
Eso a pesar de que nuestro principal cliente, que es Estados Unidos como les comentaba, nos ha comprado 20.916 millones de euros más y crecemos con él un 7,3 %, que nos permite crecer en todo el continente un 5,1 %, que equivalen a 21.062 millones, es decir, gracias a Estados Unidos somos capaces de crecer en América.
China ya lo tiene claro, está bajando las compras a los países miembros de la Unión y las relaciones están totalmente deterioradas y lo que va a producirse es una batalla comercial muy dura, en la cual no siempre hay un vencedor, aunque si lo llega a haber no va a ser la Unión Europea.
Donde estamos aguantando el tipo es con los países árabes: con Emiratos crecemos un 15,8 % y con Arabia Saudí lo hacemos en un 9 %, y entre los dos países sumamos 5.125 millones de euros en más productos.
En África vamos en retroceso y deberíamos poner en marcha mecanismos para paliar este efecto. La población en esa continente crece, el PIB per cápita poco a poco va creciendo, nos mandan inmigrantes y encima compran cada día más a los chinos, por lo tanto, con ese continente estamos también en una tormenta casi perfecta, ayudas para su desarrollo, que no nos manden inmigrantes ilegales, pero comprar, compran a los chinos. En todo el continente en sólo siete meses, hemos perdido 3.497 millones.
Es vital que la nueva Comisión Europea centre el disparo en resolver los problemas que tenemos y que el informe Draghi ha resaltado.