Fundado en 1910
El empresario ucraniano Ihor Katrych tiene cara de niño y un talento fuera de lo común.

El empresario ucraniano Ihor Katrych tiene cara de niño y un talento fuera de lo común.Pablo Cortes - FOTABLOS

El ucraniano que consigue viviendas de lujo para los rusos: «Madrid se está convirtiendo en el Miami europeo»

Ihor Katrych llegó a España desde Ucrania cuando tenía 15 años. Su madre encontró trabajo y se asentaron allí. Acabó la ESO en nuestro país, volvió a Ucrania para estudiar Derecho, y en uno de sus retornos para ver a su madre, conoció a su mujer, también ucraniana, y decidieron quedarse a vivir en Alicante.

Como Ihor sabe ruso, encontró en ello una ventaja para poner en marcha un negocio hace ya dieciséis años. De su mano compraron sus viviendas de lujo los primeros rusos que aterrizaron en Alicante: «No entendían el idioma. No sabían lo que les vendían, ni si era legal. Cuando formalizamos la primera venta con el primer cliente, Vladimir, en los tres meses siguientes me llegaron treinta peticiones de rusos que querían tener una vivienda a su lado», explica Ihor, que habla español perfectamente.

Dieciséis años después de aquello, su negocio está consolidado y en crecimiento. Su inmobiliaria de pisos de lujo K&N Elite cuenta con más de 1.000 propiedades, de las cuales 650 no salen publicadas en ningún sitio: se negocian directamente con los propietarios, que son ricos y famosos.

Ya antes del inicio de la guerra entre Rusia y Ucrania, la venta de propiedades en Alicante se ha complicado con el mercado ruso. La caída de valor del rublo desde el año 2014 y las dificultades por la guerra para traer dinero merman su capacidad de compra. Mientras tanto, el desembarco de ucranianos en la zona ha sido importante: desde el abogado de Zelenski a un conjunto de ricos y de otras clases sociales cuya llegada ha traído, entre otras consecuencias, el encarecimiento del precio del alquiler.

Los ucranianos llegaron con la idea de estar un tiempo y volver a su país en unos meses, cuando acabara la guerra. La complicación del conflicto hace que no les quede más remedio que asentarse en España e ir poniendo en marcha negocios en los que Ihor también les asesora: «Uno quiso poner un bar en donde daban desayunos con champán, pero ya le dije que aquí se desayuna con tostadas», dice. «Si quiere dar champán, que lo haga como un extra», añade.

La inmobiliaria de Ihor está consolidada en Alicante. Tiene prácticamente todas las propiedades de superlujo de la costa valenciana, que se venden a los compradores por varios millones de euros. Ahora quiere crecer en Marbella, Barcelona y Madrid. La capital de España se ha convertido en una especie de Miami europeo por la cantidad de ricos de distintas nacionalidades que está comprando propiedades, entre ellos muchos neoyorkinos.

Ihor ha montado su oficina en Madrid con Rafael Santana, un especialista que ha trabajado con las mejores inmobiliarias de lujo de Madrid. El mercado de las viviendas premium en la capital está creciendo y tiene muy buenas perspectivas de seguir haciéndolo. Prueba de ello es que bancos de inversión como Goldman Sachs recomiendan hoy en día invertir en pisos de lujo en Madrid antes que en Londres, Roma, París o Berlín.

Para Ihor este dato es muy relevante. En Madrid no hay viviendas de lujo por menos de 700.000-800.000 euros, y su inmobiliaria se embolsa entre el 4 % y el 5 % de cada venta. En Alicante, donde los precios son más bajos, su comisión es de entre el 6 % y el 7 %. De momento señala que factura alrededor de un millón de euros en su oficina de Alicante. De momento no da datos concretos de Valencia, Barcelona, Marbella o Madrid, aunque reconoce que el rápido desarrollo en la capital de España le ha «sorprendido bastante».

Su actividad le deja de todos modos tiempo también, según explica, para desarrollar actividades de solidaridad (dinero para hospitales, estudio de enfermedades, DAN, Ucrania...) a través de la Fundación del Club Rotario de Alicante, de la que es presidente.

comentarios
tracking