Andorra aprueba la ley del catalán que obligará a tener un nivel mínimo a todos los residentes

Andorra aprobó este jueves la nueva ley de la lengua propia y oficial, que establece que a partir de 2029 será necesario acreditar un nivel mínimo de catalán para renovar el permiso de residencia. La ley fue aprobada por 25 votos a favor y 3 en contra en la sesión del Consell General, mostrando un amplio consenso tras el trabajo en comisión del proyecto.

Noemí Amador, de Andorra Endavant, expresó críticas hacia la norma, argumentando que podría generar resistencia a la lengua y afectar a la economía y cohesión social. Además, lamentó las altas sanciones previstas, llegando hasta los 60.000 euros en casos graves, describiendo la ley como «excesiva y coercitiva».

Por otro lado, los grupos Demòcrates, Ciutadans Compromesos, Concòrdia y Partit Socialdemòcrata votaron a favor de la ley. Esta establece que a partir de 2026 se requerirá una formación de 30 horas de catalán para obtener la renovación del permiso de residencia si no se acredita un nivel A1, aumentando gradualmente a nivel A2 en la segunda renovación y aplicándose a todos los permisos de inmigración desde 2029.

La ley también exige que las empresas garanticen la atención al público en catalán y que las administraciones promuevan obras audiovisuales en este idioma. La ministra de Cultura, Mònica Bonell, defendió la ley, señalando que desde su anuncio el número de personas que asisten a cursos de catalán se ha triplicado, alcanzando las 1.800. Argumentó que la ley es una oportunidad de compartir y una herramienta de integración, más que una barrera lingüística.

A partir de 2029, según el texto de la nueva ley, esta exigencia se aplicará a todos los permisos de inmigración. La nueva ley obligará así a todos los colectivos, incluidos los creadores de contenidos como «youtubers» residentes en Andorra, a aprender catalán para poder residir en el principado.