Los 7 consejos a tener en cuenta a la hora de escoger universidad

Las notas de la Evaluación del Bachillerato para el Acceso a la Universidad (EBAU) ya han salido en la mayoría de las comunidades autónomas. Ahora, tras varios meses estudiando para la prueba que determina el futuro de los casi universitarios, llega la tarea más tediosa pero divertida e importante: elegir universidad.

En España, según el Ministerio de Universidades, alrededor del 80 % de los estudiantes de secundaria optan por continuar sus estudios en la universidad, el resto prefiere hacer Formación Profesional. Este alto porcentaje refleja la importancia que se le da a la educación superior como una vía para garantizar un futuro profesional prometedor y estable.

Aunque la decisión sobre la universidad y la carrera se toma días después de las calificaciones, es importante que el futuro universitario haya tenido meses antes una formación para saber cómo tomar esta decisión y no equivocarse en el proceso. Es de vital importancia escoger algo que apasiones, ya que son asignaturas que van a determinar tu futuro profesional.

Aunque lo bonito sería que todos los estudiantes continuasen los estudios, la realidad es otra muy diferente. Un estudio de BBVA en colaboración con Ivie, ha mostrado que si el alumno no está contento y motivado con el centro de enseñanza y la carrera, lo más probable es que deje de estudiar. Para que esto no ocurra, este debe informarse bien y tener en cuenta la opinión de los expertos de la escuela en la que se realiza segundo de Bachillerato. Sin embargo, no todo vale.

En este sentido, Luiza Pires, orientadora de carreras profesionales en The British School of Barcelona, explica que los estudiantes deben ser «los actores principales de la investigación de las opciones a su alcance» para escoger el programa que mejor se ajuste a su perfil e intereses. Pero para que puedan llevar a cabo ese proceso, «tenemos la responsabilidad de darles todas las herramientas posibles».

Escuchar a los orientadores y dejarse asesorar por ellos, es un paso que deben dar los jóvenes que quieren curar estudios universitarios, pero también tienen que hacer introspección y decidir por ellos mismos su futuro. Para ello, hay siete consejos que podrían ayudar a los recién graduados a elegir una carrera y una universidad que encajen con sus gustos y ambiciones.

En primer lugar, es esencial que el alumno conozca todas sus habilidades y capacidades. Con 17 o 18 años, muchas decisiones de cara al futuro están más o menos claras. Esto, lleva a seguir un camino correcto. A pesar de ello, es necesario escucharse a uno mismo, ver qué es lo que mejor le viene para su futuro y qué camino escolar se le ha hecho sencillo en cuanto a materias.

El centro, también recomienda identificar sus aspiraciones y metas a largo plazo. Para ello, es bueno clarificar las ambiciones y metas profesionales a largo plazo. Este, aseguran, es un paso crucial para elegir la universidad adecuada. También sirve preguntarse dónde se ve en cinco, 10 o 20 años, y qué tipo de carrera le gustaría seguir.

Investigar la oferta académica es muy importante. La oferta académica ha crecido significativamente en las últimas décadas, concretamente un 18 % desde el curso 2014-2015, según datos del Sistema Universitario Español (SUE). «Esta expansión», comenta Pires, ofrece más oportunidades para encontrar un programa que se ajuste perfectamente a los intereses y objetivos profesionales. Sin embargo, afirma, es crucial investigar y comparar «los planes de estudio de distintas universidades» para asegurarse de que el programa elegido cubra las expectativas.

Otro de los puntos que destaca la experta tiene que ver con

considerar las instalaciones y las oportunidades de experiencia práctica. Así, recuerda que hay que asegurarse de que el centro cuente con las instalaciones necesarias que garanticen el buen desarrollo y aprendizaje de sus estudiantes. Además, es interesante considerar si el centro dispone de recursos que permitan a los estudiantes aplicar sus conocimientos en contextos reales, o que tenga convenios con empresas o una sólida red de apoyo profesional.

La quinta recomendación es algo tediosa, pero esencial. La orientadora pide a los alumnos realizar un análisis exhaustivo de la institución. En este sentido, comenta que es «muy importante» que el joven investigue a fondo las universidades para encontrar aquellas que mejor encajen con su perfil. Aquí hay varios factores que pueden ser evaluados. Algunos podrían priorizar "la calidad de la enseñanza, otros las áreas de investigación, el profesorado, las instalaciones, o la empleabilidad», explica Pires.

Considerar la localización y el ambiente universitario. Una vez se llega a este punto hay que saber que la experiencia universitaria va más allá de las aulas. Los centros situados en ciudades grandes ofrecen una amplia gama de actividades culturales y de ocio, mientras que las ubicadas en ciudades más pequeñas pueden proporcionar un ambiente más tranquilo y concentrado. Las actividades ofrecidas por las propias instituciones, ya sean recreativas, deportivas o sociales, son aspectos que también pueden influir.

Por último, recomiendan estar abiertos al cambio. La resiliencia y la adaptabilidad son cruciales para el éxito a largo plazo. Es importante que los jóvenes entiendan que no pasa nada por cambiar de carrera si sus intereses o las circunstancias evolucionan. Contemplar varias opciones puede aliviar la presión y ofrecer una alternativa valiosa si las cosas no salen como se esperaba inicialmente.