Los socios nacionalistas y de extrema izquierda de Sánchez reaccionan criticando en cascada su renuncia al Sáhara

el Palacio Real de Marruecos era ayer el primero en hacer saber a los españoles que el Gobierno de España ha decidido suscribir las pretensiones de Rabat en el conflicto del Sáhara. El malestar es generalizado, también entre los socios de Sánchez que, al igual que el resto de españoles, han tenido noticia de esta decisión por la presa. Por ello, se están produciendo en las últimas horas una catarata de reacciones en el amplio espectro del mundo nacionalista y de la extrema izquierda.

El presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, ha tachado de error la posición del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, respecto al plan de autonomía para el Sáhara planteado por Marruecos, y defiende «un referéndum de autodererminación del Sáhara Occiental como herramienta para la resolución del conflicto».

En un tuit recogido este sábado, ha sostenido que «es necesaria una rectificación y volver a la defensa» de un referéndum de autodeterminación, de acuerdo con la Organización de las Naciones Unidas (ONU). «La decisión del Estado español es un error con consecuencias muy importantes, especialmente sobre el pueblo saharaui», ha añadido Aragonès.

Los comunes

La líder de los comuns en el Parlament, Jéssica Albiach, ha pedido al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que «sea coherente y que cumpla con su propio programa electoral, que reconoce que la resolución del conflicto pasa por el derecho a la autodeterminación del pueblo del Sáhara».

Lo ha dicho en declaraciones ante los medios antes de la constitución de la conferencia sectorial 'Para los derechos de todos los animales' de los comuns en un acto en Montmeló (Barcelona) este sábado, al que han asistido el portavoz de comuns y diputado en el Congreso, Joan Mena; la coordinadora de la sectorial Rosa Mateu; el director general de Derechos de los Animales del Gobierno, Sergio García, y el concejal de Montmeló y coordinador de la sectorial, Jordi Manills.

«La resolución del conflicto entre Marruecos y el Sáhara tiene que pasar sí o sí por el cumplimiento de las resoluciones de las Naciones Unidas y por un referéndum de autodeterminación», ha dicho Albiach en declaraciones a los medios.

Nueva Canarias

El presidente de Nueva Canarias (NC), Román Rodríguez, ha expresado «el más absoluto de los rechazos» al cambio decidido por el presidente estatal y secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, al apoyar y «dar carta de naturaleza» después de 46 años de conflicto a los planes de Marruecos de autonomía para el Sáhara Occidental.

El presidente de NC ha denunciado en un comunicado que este giro «contraviene el derecho internacional, ya que Marruecos no tiene la soberanía del territorio, que ocupa por la fuerza el Sáhara Occidental desde 1975 e incumple los acuerdos de la Organización de Naciones Unidas (ONU)».

Román Rodríguez ha reiterado la solidaridad de NC, de todas las instituciones canarias y la sociedad de las Islas «con la justa causa del pueblo saharaui» y se ratificó en «una solución pacífica de este doloroso conflicto, que dura más de 46 años y que solo será posible con la celebración de referéndum de autodeterminación, garantizando el respeto a la democracia y a la libertad».

El diputado nacional de NC Pedro Quevedo suscribirá una petición de comparecencia de Pedro Sánchez en el Congreso de los Diputados. «No creemos que los socialistas vayan a encontrar muchos aliados en esta posición injusta e unilateral, con la que se pone de parte del ocupante en un conflicto arrastrado durante casi medio siglo», aventuró el presidente de NC.

Izquierda Unida

El secretario de Estado para la Agenda 2030 y secretario general del Partido Comunista de España (PCE), Enrique Santiago, ha aseverado este sábado que el Gobierno de España, del que él forma parte, «no puede apoyar ninguna medida contraria al derecho de autodeterminación del pueblo saharaui».

En una atención a medios en Jerez de la Frontera (Cádiz), Enrique Santiago se ha pronunciado así a preguntas de la prensa después de que el Ejecutivo de Pedro Sánchez anunciase este viernes el inicio de un «nueva etapa» en la relación con Marruecos basada en el respeto mutuo y con la vista puesta en garantizar tanto la estabilidad como la integridad territorial de ambos países.

Enrique Santiago se ha desmarcado de ese plan de autonomía y ha reivindicado la posición de Unidas Podemos al respecto de esta cuestión, que, según ha abundado, «coincide con la posición de Naciones Unidas», y que pasa por la «defensa de los derechos históricos del pueblo saharaui y la resolución del conflicto en el marco del proceso de descolonización que implica un referéndum para que el pueblo saharaui decida libremente sobre su futuro».

PNV

El presidente del EBB del PNV, Andoni Ortuzar, ha dicho que su partido no comparte el cambio del posición del Gobierno central de avalar el plan de autonomía de Marruecos para el Sáhara Occidental y ha advertido de que «no es el momento de innovar», sino de «cumplir la legalidad internacional».

En una rueda de prensa en Bilbao para dar lectura a una comunicación relativa a la invasión de Ucrania que el EBB ha trasladado a la Asamblea Nacional de EAJ-PNV, Ortuzar ha asegurado que el PNV no va a dar su apoyo a «ninguna decisión que vaya en la dirección» anunciada por el Ejecutivo de Pedro Sánchez.

Tras insistir en que el PNV «no comparte el cambio de posición del Gobierno español sobre el Sáhara», Ortuzar ha señalado que «hay resoluciones de las Naciones Unidas que hay que cumplir» y ha considerado que «no es el momento de hacer cambios», sino de «cumplir la legalidad internacional».

«Es el momento de un proceso negociador entre el Sáhara y Marruecos para que se pueda producir una solución democrática al contencioso saharaui, basada en la libre voluntad y decisión del pueblo saharaui», ha mantenido.

En ese sentido, ha insistido en que «no es el momento de innovar» y ha adelantado que el PNV no va a dar su apoyo a «ninguna decisión que vaya en la dirección» planteada por el Gobierno central, que ayer anunció el inicio de un «nueva etapa» en la relación con Marruecos basada en el respeto mutuo y con la vista puesta en garantizar tanto la estabilidad como la integridad territorial de ambos países.