Colau pone pie y medio fuera de la Alcaldía de Barcelona, acorralada por el PSC y los vetos

La campaña electoral no está sentando bien a la alcaldesa de Barcelona, por su condescendencia con los okupas en pleno conflicto vecinal en la plaza de la Bonanova. El reinado de Ada Colau en la Ciudad Condal peligra. El desenlace va a ser casi de foto finish, y todo apunta a que la Alcaldía se decidirá en los despachos, no en las urnas.

Transcurrida la primera semana de campaña, la encuesta de Target Point para El Debate sitúa al socialista y primer teniente de alcalde en esta legislatura Jaume Collboni como ganador de las elecciones, con una intención de voto del 21,7 %. Por detrás se quedaría la alcaldesa y candidata de Barcelona en Comú, con el 20,4 %, a 1,3 puntos de distancia. Entre ambos hay un empate técnico de concejales. El tercero en discordia es Xavier Trías, de Junts per Catalunya, con el 18,9 %.

Hay, pues, tres candidatos que se mueven en una horquilla de entre el 18 % y el 22 % de intención de voto. Y un cuarto en escena: el de ERC, Ernest Maragall, al que el sondeo sitúa en el 13,6 %. Un auténtico descalabro, teniendo en cuenta que hace cuatro años ganó las elecciones, aunque empató a 10 concejales con Colau. La fragmentación del voto es total y sus efectos, imprevisibles. Lo más probable es que sea necesario un pacto tripartito para alcanzar los 21 concejales, la cifra de la mayoría absoluta.

Maragall se ha desgañitado en campaña negando que vaya a hacer alcalde a Collboni, pero el socialista le ha respondido, retador, que tendrá que hacer «lo que diga Pere Aragonès». Recordando así al candidato de ERC que su partido está en deuda con el PSC, puesto que los socialistas acudieron al rescate del presidente de la Generalitat y salvaron sus Presupuestos de 2023 cuando éste rompió su coalición con Junts.

El PP y Vox completan el mapa

Completan el mapa de la Ciudad Condal el PP y Vox, mientras que se quedarían fuera Ciudadanos, la CUP y Valents (herederos de la candidatura de Manuel Valls en 2019), al no llegar al listón del 5 % de intención de voto. El PP, con Daniel Sirera al frente, es el partido que más crece respecto a 2019, junto con Junts. Pasaría del 5 % al 9,3 % de los votos y, paradójicamente, Sirera puede convertirse en la llave que abra la Alcaldía.

De momento, a lo que se ha comprometido el candidato popular es a no hacer alcaldesa a Colau ni tampoco a Maragall. De tener que negociar lo haría con Collboni o Trías, aunque sean escoger entre «susto y muerte», como afirmó de forma gráfica en una entrevista en TV3.

Vox también puede dar el estirón en estos comicios y entrar por primera vez en el codiciado Consistorio de Barcelona, al pasar del 1,2 % del voto que obtuvo en las anteriores elecciones al 5 %, justo en la barrera. Su candidato es Gonzalo de Oro-Pulido. En cambio, no hay opciones para Anna Grau (Cs), Eva Parera (Valens) y Basha Changue (CUP).

Target Point estima estos resultados con una participación de entre el 65 y el 66 %, similar a la de 2019. Si ésta baja del 60 % podría haber cambios importantes en el reparto.

La encuesta deja varias curiosidades. Como que Colau es la candidata con mayor fidelidad de voto, del 76,8 %, a pesar de que su gestión en esta legislatura ha sido muy controvertida. En el lado contrario se sitúa Cs: solo uno de cada cuatro barceloneses que votó naranja en 2019 volverá a hacerlo. Las cifras de Maragall también son devastadoras: la fidelidad de sus votantes apenas alcanza el 44,5 %, puesto que el 19,7 % de ellos prefiere votar esta vez a Trías. A pesar de que Esquerra es el partido que más encuestados declaran como el más cercano a su ideología, el 17,3 %.

En cuanto a valoración de candidatos, ninguno alcanza el 4 de nota media. El que obtiene mejor puntuación es Trías, con un 3,89. Por detrás van Maragall, 3,82; Collboni, con 3,48; y Colau, con 3,46.

En cuanto al perfil de los votantes, casi la tercera parte de los votantes potenciales de Ada Colau ingresa más de 4.000 euros brutos al mes. Para ella, Sant Andreu, Nou Barris y Sants-Monjüic son los distritos fuertes. Collboni, por el contrario, tiene sus mejores caladeros de voto en Nou Barris, Sant Martí y Les Corts. En el distrito de mayor renta per cápita, Sarrià-Sant Gervasi, el candidato con mejores perspectivas es Trías.

Lo que pase en el Ayuntamiento de Barcelona entre el 28 de mayo y el 17 de junio, que es el día en el que han de constituirse los ayuntamientos de toda España, tendrá repercusión nacional. En primer lugar, porque la actual alcaldesa ha sido y es uno de los principales apoyos de Yolanda Díaz, que a su vez se ha implicado en la campaña de Colau como en ninguna otra. Así que si pierde el bastón de mando, la derrota se hará extensible a la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo.

En el caso de Collboni, si consigue ser alcalde con los votos de ERC, la alianza entre socialistas e independentistas republicanos quedará más afianzada.