El 'annus horribilis' de Baltar, el mandamás orensano del PP

El pasado 23 de abril, José Manuel Baltar fue cazado a 215 kilómetros por hora cuando conducía un coche oficial de la Diputación de Orense, de la que es presidente. Este miércoles iba a ser juzgado por ello en Puebla de Sanabria (Zamora), pero lo impidió la huelga de Justicia. Todo indica que cuando se celebre el juicio será condenado por un delito contra la seguridad vial. El pasado domingo, 28 de mayo, los votos en los partidos judiciales de la provincia dejaron a Baltar a un solo diputado de renovar su cargo, y conseguirlo no será esta vez tan sencillo como cuatro años atrás. La renovación de su presidencia depende de nuevo de Democracia Orensana (DO), que es quien se la dio entonces, pero ahora la situación es muy diferente.

¿Qué ocurrió en 2019? Pues que el PSOE ganó las elecciones en el Ayuntamiento al lograr nueve ediles. Los populares obtuvieron siete, los mismo que DO pero con más votos, pero cedieron la alcaldía a Jácome a cambio de que éste apoyase la investidura como presidente de la Diputación a José Manuel Baltar, que se había quedado en 12, a uno de la mayoría absoluta; los dos votos de DO lo confirmaron como máximo mandatario del ente provincial, cargo que ostenta desde el 6 de febrero de 2012, cuando lo heredó de su padre. Jácome tuvo que tragarse su orgullo, pues se había pasado años arremetiendo contra el baltarismo desde la televisión local en la que adquirió fama.

¿Cómo ha quedado la situación en una y otra institución tras las elecciones del pasado domingo? En la Diputación el PP logró 12 diputados, por 7 del PSOE, 3 del BNG y otros tantos de DO. Es decir, a Baltar le vuelve a faltar un voto a favor. Por su parte, la situación en el Ayuntamiento de Orense resulta ser así: DO subió tres concejales respecto a 2019 y alcanzó los 10, pero está lejos de la mayoría absoluta (14). La representación se completa con el PP (7), PSOE (6) y BNG (4).

La situación actual

¿Qué problema hay para que se repita el intercambio de sillones de 2019? Pues la controvertida acción de gobierno de Jácome durante los últimos cuatro años y el hecho de que desde mayo se han hecho públicos unos audios muy comprometedores del alcalde y en los que se advierten presuntas irregularidades en la gestión municipal. De hecho, el propio PP ha denunciado ante la Fiscalía esos audios para que se investigue su contenido.

No es el único obstáculo. El candidato a alcalde del PP, Manuel Cabezas, se ha pasado la precampaña y la campaña repitiendo que jamás pactará con Jácome. Es más, el pasado marzo, Baltar dejó caer que se podría reeditar el acuerdo de 2019 –o sea, alcaldía por presidencia de la Diputación–, y enseguida replicaron que ese pacto no podría repetirse tanto Cabezas como el líder del PP gallego y presidente de la Xunta, Alfonso Rueda. En las últimas horas, conocidos los resultados de las municipales, el candidato local del Partido Popular ha vuelto a ser contundente en este aspecto.

Baltar es una figura clave del PP gallego, pues su provincia es el gran vivero tradicional de votos para el partido fundado por Fraga, y hay unas elecciones generales a dos meses vista y unas autonómicas el próximo año, comicios estos últimos en los que Orense volverá a ser clave para que los populares puedan repetir la mayoría absoluta de la que ahora gozan en la Xunta. O sea, que a su partido le conviene tenerlo muy contento. Pero, por otra parte, Cabezas parece tajante en su postura de no apoyar a Jácome. Estos días, el todavía presidente de la Diputación moverá hilos. Como gran madridista y devoto de Juanito que es, Baltar sabe que las remontadas imposibles existen.