El Gobierno no cierra la puerta a la amnistía de Puigdemont: «No estamos en ese escenario todavía»
Pilar Alegría asegura que el Ejecutivo contestará con «diálogo» y «dentro de la Constitución», después de negar que pudiera ampararla la Carta Magna
La amnistía que reclama Carles Puigdemont por los delitos cometidos durante el procés en Cataluña está sobre la mesa para una posible investidura de Pedro Sánchez. El Gobierno, que años atrás ha negado que fuera posible porque no entraba en la Constitución, ahora contradice sus propias palabras y no cierra la puerta a la posibilidad de que se lleve a cabo.
La ministra de Educación, Pilar Alegría, reconoció que «todavía» no se encontraban en el «escenario» de negociar una amnistía con Puigdemont, porque era Feijóo quien ahora tenía que hablar para poder recabar apoyos de cara a un Gobierno. La portavoz del PSOE subrayó también que su partido trabajará «con diálogo» y «dentro del marco constitucional», sin querer entrar a valorar si la amnistía chocaría con lo que recoge la Carta Magna.
Alegría manifestó también que siempre se han caracterizado por llevar todos los asuntos a base de «diálogo», bajo los parámetros «de la coherencia y la transparencia». El mismo discurso que desarrolló este martes la vicepresidenta Calviño también en Bruselas, que evitó contestar a las preguntas de la prensa sobre la amnistía y basó su argumentario en «diálogo y Constitución».
La ministra de Educación realizó estas declaraciones antes de su entrada en una audiencia de la Comisión de Cultura del Parlamento Europeo para hablar sobre las prioridades de la presidencia española del Consejo de la Unión Europea. En dicha sesión también comparecía el ministro de Cultura, Miquel Iceta, quien siguió la línea marcada por Moncloa con respecto a la amnistía.
Evitó responder a si el Gobierno está dispuesto a cumplir las exigencias de Puigdemont y aprovechó para recordar que «solo cuando gobernaba el PP» se vulneró la legalidad en Cataluña. Iceta defendió un «reencuentro» y una «convivencia», aunque descartó la posibilidad de una posible reunión con Puigdemont: «Si me lo cruzo por un pasillo lo saludaré porque soy educado, pero ni se la pienso pedir yo».