Los pactos del PSOE acorralan al Gobierno, que carga contra Feijóo por no reunirse con Sánchez

los ministros del PSOE parecen impacientes por que se celebre una reunión entre Pedro Sánchez y Alberto Núñez Feijóo, un encuentro que quieren que llegue en pleno inicio del trámite parlamentario de la ley de amnistía, por un lado, y del pacto para entregar Pamplona a Bildu. Por esto los populares consideran que con esa reunión los socialistas quieren «tapar una foto con otra».

En la sesión de control al Gobierno en el Senado los ministros se apresuraron en sus intervenciones, y ante las preguntas de la oposición para que den explicaciones sobre los pactos con el separatismo y los abertzales, a criticar a Feijóo y a apremiarle a cerrar una fecha para reunirse con el presidente del Ejecutivo, como hizo esta misma mañana la portavoz Pilar Alegría tras el Consejo de Ministros, que urgió al PP a elegir una fecha, o el 22 o el 29 de diciembre.

«Le recomiendo que cuanto antes el señor Feijóo venga a hablar con el presidente del Gobierno y podamos pasar del ruido al trabajo, del conflicto a la concordia, que trabajemos juntos por el futuro de nuestro país», señaló Nadia Calviño, vicepresidenta y ministra de Economía, que más tarde acusó a los populares de recurrir a «ataques personales» e «insultos». En la que fue su última intervención en la Cámara Alta antes de irse a Bruselas, llegó a pedir al PP que trate de «dejar atrás este ruido, esta crispación, el insulto y el ataque personal».

Para Félix Bolaños, por su parte, Feijóo debería «pedir disculpas» a los españoles por estar «negándose» a ir a la llamada de Sánchez. Y le reiteró el orden del día que, aunque no se lo han hecho llegar a los populares, aseguran que se limita a la renovación del CGPJ, a la modificación del artículo 49 de la Constitución y a la financiación autonómica. El PP lo quiere por escrito, porque no se fía del PSOE. «Espero que Feijóo acuda a la llamada del presidente y que pida disculpas por haber estado dando excusas muy poco razonables para no ir», afirmó el ministro de Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes.

Los senadores del PP y de Vox les reprocharon en sus intervenciones sus pactos con los partidos separatistas, la «colonización» de las instituciones o la ley de amnistía, pero lejos de responder al respecto recurrieron a descalificaciones a la oposición. Especial presencia tuvo el reciente pacto del PSOE con Bildu para entregar a los de Otegi la capital de Navarra.

La senadora Marimar Blanco, hermana del concejal de Ermua asesinado por ETA, Miguel Ángel Blanco, denunció la «mentira» de Bolaños, que negó en la Cámara haber llegado a un acuerdo con la formación abertzale y horas después se conocía el acuerdo de Pamplona, que la senadora popular describió como «el primer pago del impuesto revolucionario exigido por Otegi». «España no ha ganado una alcaldía progresista, pero el PSOE sí ha perdido la dignidad y la memoria», aseveró.

El ministro de Política Territorial y Memoria Democrática, Ángel Víctor Torres, respondió que «Bildu está donde todos queríamos que estuviera, que es en la política», dijo recibiendo el abucheo de la bancada popular, y excusó el pacto –en línea con el argumentario del PSOE– en la «incapacidad» de UPN para llegar a acuerdos para sacar los presupuestos de Pamplona.

«Han pasado ustedes de un Gobierno Frankenstein a un Gobierno zombie. El precio que han empezado a pagar ustedes para que Sánchez se mantenga en el poder es descomunal (...). Es el precio de la integridad del Estado de derecho, de la soberanía nacional y de la democracia», señaló la primera senadora en intervenir, la popular Alicia García. «Si hay algo que sí que es de primero de democracia es no entregar el Ayuntamiento de Pamplona precisamente a sus nuevos amigos de Bildu», dijo su compañero de bancada, Joaquín Miranda de Larra.

La parlamentaria Yolanda Ibarrola preguntó sobre el posicionamiento unánime del poder judicial contra la ley de amnistía. «Saben que esta proposición de ley es jurídicamente, políticamente y moralmente inaceptable», le espetó al grupo socialista. «Su hipocresía hablando de convivencia ha sido desnudada por Junts, que le corrige: 'Esto no va convivencia va de dos naciones negociando'», remarcó, al tiempo que aseguró que el Senado conocerá los informes del CGPJ y otros órganos consultivos sobre la polémica norma que, según vienen denunciado, el PSOE ha querido eludir tramitándola como proposición de ley y no como proyecto de ley.

Bolaños quiso eludir la pregunta sobre los pactos con los separatistas respondiendo al senador de Vox con otra pregunta sobre los pactos de su partido con el PP en las regiones donde gobiernan juntos y el que firmaron para la investidura de Feijóo. «¿Cómo califica usted los pactos con Bildu que ustedes negaban dos días antes de las elecciones?», señaló Ángel Pelayo Gordillo, que vaticinó que terminarán entregando a Bildu Navarra y el País Vasco. El ministro de Presidencia presumió de «transparencia» al señalar que los acuerdos eran públicos y arremetió contra la que denominó la agenda «oculta o reaccionaria» de PP y Vox en sus ejecutivos.