García-Gallardo denuncia el exceso de restricciones y burocracia que amenaza el sector de la fresa

El vicepresidente de la Junta de Castilla y León, Juan García-Gallardo, ha denunciado este martes que el futuro del sector de la fresa, «pujante» en la región, está amenazado por el exceso de restricciones y de burocracia del Gobierno central. En su visita a la finca segoviana de la empresa Planasa, líder en España y en el mundo en producción de plantas de frutos rojos, ha explicado que los excesos de regulación de la UE «ahogan al sector» y el Ejecutivo agrava la situación al establecer restricciones más estrictas en materia de fitosanitarios.

García-Gallardo ha criticado, en este sentido, la competencia desleal, tanto de terceros países como de países dentro de la propia UE, porque por ejemplo en España, según explicó el vicepresidente, están prohibidos productos que están permitidos en países como Italia o Portugal. Así, ha instado al ministro de Agricultura, Luis Planas, a dejar de adoptar medidas «que destruyen nuestro tejido productivo» si no quiere que «desaparezca» el sector de las plantas de fresa en España. Un sector que, como remarca la Junta de Castilla y León, da empleo a más de 2.000 personas en la región de forma estable.

Además, ha exigido al Ejecutivo de Pedro Sánchez «que refuerce de una vez el control en frontera de los productos que entran en España, para que se les exijan los mismos requisitos de seguridad alimentaria que a los de aquí», después de conocerse la alerta sanitaria por presencia de Hepatitis A en las fresas llegadas de Marruecos. «Esto ya no es sólo un problema comercial de competencia sino también de salud pública», ha expresado, al tiempo que ha animado a consumir productos de Castilla y León, «que son sinónimo de garantía, calidad y productos saludables».

También esta tarde en el Senado, el parlamentario Ángel Pelayo ha recriminado al ministro Planas ese «escándalo» de las fresas contaminadas que al parecer habían sido regadas con aguas fecales. Esto, a su juicio, «evidencia el lamentable estado de los controles sanitarios y aduaneros en nuestras fronteras, que son absolutamente laxas en los controles fitosanitarios que se exigen a los productos extracomunitarios».

«Están a tiempo de avisar a los consumidores españoles de que no consuman productos de países que no tienen los controles necesarios», le ha espetado en la sesión de control al Gobierno, a quien ha reclamado prohibir la importación de estas fresas e implementar «controles severos» en las aduanas para los productos que llegan de Marruecos. Asimismo, Pelayo Gordillo ha denunciado, en línea con García-Gallardo, las «directivas absurdas» que acosan al producto nacional por la «obsesión climática» derivada del Pacto Verde Europeo.