El PSOE y Sumar ignoran las advertencias de la RAE sobre el lenguaje inclusivo en los textos parlamentarios

La proposición de ley de reforma del Reglamento del Congreso –registrada por el PSOE y Sumar– se debate este martes, 19 de marzo, en el Pleno de la Cámara contará con el rechazo del Partido Popular y Vox.

Una vez que el Gobierno de coalición consiga el respaldo de la Cámara Baja, comenzará una tramitación parlamentaria que conllevaría quitar el lenguaje «sexista» de los 207 diferentes artículos que lo conforman.

Por el contrario, los populares no ven necesario modificar el Reglamento, que verá alterado hasta su título «Reglamento del Congreso», prescindiendo del complemento «de los diputados» que sí pervive en la Constitución. Vox, lo ha dejado claro y votará en contra de implantar este nuevo lenguaje inclusivo.

Sin embargo, el Gobierno de colación espera que esta revisión «feminista» de las normas parlamentarias se tramite de forma urgente y así, tenerlo listo lo antes posible.

El PSOE y Sumar defienden que la introducción en el Reglamento del lenguaje con perspectiva de género es una más de las medidas desplegadas por la Mesa del Congreso en aplicación del Plan de Igualdad de las Cortes Generales, que cumple ahora cuatro años en vigor.

Ya en el pasado mes de diciembre, la Mesa del Congreso aprobó las «Recomendaciones para un uso no sexista del lenguaje en la Administración parlamentaria», una guía, asumida también por el Senado, que sí contó con el aval del PP. El partido de Alberto Núñez Feijóo respaldó ese documento que trataba de unas recomendaciones para la redacción de textos. Sin embargo, consideran innecesaria la revisión completa del Reglamento y, además, alertan de que sentaría un precedente que abriría la puerta a la modificación de otros textos legales en el mismo sentido. Con aquella reforma ya se aprovechó suprimir el masculino genérico de los artículos que se modificaron.

Seis meses después arranca su camino parlamentario la proposición de ley por la que se reformarán las normas de la institución y que, desde entonces, sólo se han sometido a reformas puntuales, porque todos los intentos anteriores para actualizarlo han fracasado.

Ya lo advirtió la RAE

La RAE criticó el pasado 13 de febrero el documento Recomendaciones para un uso no sexista del lenguaje en la Administración parlamentaria, que planteó la Mesa de la Cámara Baja n diciembre de 2023. Una vez más, la RAE ha mostró su rechazo a la utilización del lenguaje inclusivo defendiendo que «no son sexistas muchos usos gramaticales y léxicos del español que las autoridades presentan como tales» y advirtió que este cambio del lenguaje puede llegar a «modificar considerablemente el sentido de lo que se desea expresar».

Por el contrario, la RAE sí comparte la convicción de que las mujeres y los hombres han de poseer los mismos derechos y deberes, pero insisten en que esto se consigue mejorando la educación que los jóvenes reciben en los colegios y «trabajando de otras muchas formas por una sociedad que refleje de manera efectiva todos esos valores».

Masculino inclusivo

Lo que crea un mayor conflicto, según la RAE, está en el llamado masculino inclusivo. Aunque la academia celebró que el Congreso hubiera tenido en cuenta algunas de sus recomendaciones –como que se evite el uso de la arroba como comodín de las vocales o las letras 'e' o 'x'–, emitió una nota en la que rebatía a las autoridades que «forzar de manera artificial» la gramática y el léxico no implica avanzar en la igualdad.

En su nota, criticaban una generalización por parte de las autoridades de considerar sexistas a aquellos hablantes que no aplican sus normas impuestas. “Sería, pues, sexista, el lenguaje cotidiano de la mayor parte de los millones de hispanohablantes de todo el mundo, incluyendo el de los propios parlamentarios españoles cuando no hablan desde la tribuna o no redactan proyectos legislativos», han expresado desde la RAE.