El jefe de la UME exculpa a Mazón y Sánchez: «El procedimiento ha sido correcto y la escalada de fuerzas la más adecuada»

El jefe de la Unidad Militar de Emergencia, el teniente general Javier Marcos, ha comparecido este lunes en la Moncloa para defender el operativo desplegado desde que el pasado martes, frente a las quejas de los ciudadanos afectados por la tardanza. Ya hay 7.800 militares sobre el terreno.

«¿Se imagina si en Utiel Requena metemos 5.000 personas en cinco horas? Lo podemos hacer, técnicamente. ¿Se imagina el caos? Intervinimos lo más rápidamente posible y en estrecho contacto con todos los servicios de emergencia de la comunidad autónoma. Creo que el procedimiento ha sido correcto y la escalada de fuerzas la más adecuada, compartiendo el sentimiento de dolor de todos los afectados», señaló el jefe de la UME.

Durante su comparecencia, el teniente general Marcos dejó claro que es la comunidad autónoma la que decide «dónde vamos y dónde no vamos», pero que determinar el número de efectivos es competencia suya. «Yo soy el responsable del dimensionamiento, pero la entrada en la zona es responsabilidad del director de la emergencia (en este caso, la administración regional)», aclaró, frente a aquellos que acusan al presidente valenciano de no haber solicitado un número suficiente de soldados.

Éste evitó polemizar sobre si el Gobierno debería o debe aún declarar la emergencia nacional -activando el nivel de alerta 3-, como minutos antes de su comparecencia había vuelto a pedir Alberto Núñez Feijóo. El teniente general subrayó que ésa no es una atribución suya y remachó: «Yo lo que creo es que tengo que cumplir con mi misión, servir para salvar. No voy a entrar en ninguna valoración ajena a lo que es mi misión. No quiero distraer ni un ápice de mi atención y de mis soldados», se excusó.

El jefe de la UME y del operativo relató que, el martes, la UME ya venía siguiendo el empeoramiento de la situación meteorológica. Así que ordenó que fueran a sus puestos los 500 soldados del batallón de intervención de emergencias número 3, ubicado en la base Jaime I, en Bétera, Valencia. «Ordené el despliegue adelantado, de manera que cuando esa autorización -la del Gobierno valenciano- llegara, estuviéramos en condiciones de entrar inmediatamente». En 15 minutos, según continuó, estaban preparados. Y 100 militares consiguieron entrar en la zona de Utiel Requena, a pesar de las dificultades de movilidad, por la meteorología y «porque las infraestructuras estaban destrozadas», recordó.

Y continuó: «Cuando vi lo que podía ocurrir alerté a 1.000 militares. En cuanto se produjo la luz verde para intervenir en el resto de la provincia de Valencia, 1.000 militares procedentes de cinco batallones se desplazaron durante toda la noche para que, al amanecer, el pueblo de Valencia viera que las Fuerzas Armadas estaban ahí».

El jefe de la UME pidió a la ciudadanía «ser disciplinados y tener paciencia». «Estamos haciendo todo lo que podemos, doblamos turnos. Estamos en cada puerta, en cada calle. No nos podemos mover con la facilidad que quisiéramos. No nos dejamos una casa atrás. Conozco bien a mis soldados y se están dejando la piel en todo momento. No se puede poner en tela de juicio ningún comportamiento de las Fuerzas Armadas», insistió.