La juez del caso Esther López estudia este viernes si encarcela al sospechoso tres años después del crimen

Justo cuando se acaban de cumplir tres años desde que la joven Esther López desapareciera en el pequeño pueblo de Traspinedo (Valladolid), y que fue encontrada muerta unas semanas después, la juez encargada del caso ha citado para este viernes a las partes para estudiar si acepta la medida solicitada por la hermana de la víctima, Inés, de encarcelar al acusado y principal sospechoso del crimen.

No es la primera vez que dicha parte acusadora solicita el encarcelamiento provisional de Óscar S.M, toda vez que a lo largo de la instrucción la hermana de la fallecida ya se ha dirigido con idéntica petición que ha sido denegada tanto por la instructora como por parte de la Audiencia Provincial, órgano éste último que entendía suficientes las medidas cautelares ya acordadas y descartaba la posibilidad de fuga del investigado o de que éste pudiera destruir pruebas.

Sin embargo, ante el demoledor auto de la juez del pasado día 9 en el que ordenaba practicar nuevas pruebas para «continuar la tramitación del presente procedimiento para juicio», la hermana ha vuelto a presentar una petición de ingreso en prisión.

Indicios

En el auto del día 9, la instructora considera que existen indicios de que la madrugada del 13 de enero de 2022, tras estar en el bar de la localidad, la víctima se fue con el investigado y con otro hombre a la zona de las bodegas, «para después, en el coche de Óscar S.M, dirigirse al domicilio de 'Carolo' al lado del local La Maña de Traspinedo, donde éste se baja. Óscar y Esther se dirigieron a una vivienda del municipio, de la familia del investigado que éste utilizaba habitualmente, y tras estar juntos en ella, la mujer abandonó la misma a pie, saliendo él tras ella en su vehículo Volkswagen T-ROC con el que la atropelló muy cerca de ese inmueble, causándole serias lesiones, pero no la muerte».

El auto recurrido recoge que «siendo consciente de que Esther se encontraba con vida, lejos de prestar ayuda o solicitar ayuda que otros pudieran prestar, el investigado esperó entre una y tres horas hasta que comprobó que ella estaba ya muerta, procediendo a ocultar el cadáver y finalmente meterlo en el maletero de su vehículo y tirarlo, horas después, en el lugar donde fue hallado el día 5 de febrero, no dando noticia directa o indirecta de donde se encontraba. Tanto Esther como Óscar habían ingerido esa noche bebidas alcohólicas».

Por todo ello, la juez requirió al investigado para que abonara una fianza de 205.000 euros para hacer frente a las responsabilidades pecuniarias a las que pudiera tener que hacer frente en el caso de ser condenado.