A pesar del mal tiempo, la ciudad de Málaga se rindió a su equipo y lo arropó durante todo su recorrido
Málaga
La 'marea verde' malagueña celebra con el Unicaja su triunfo en la Champions FIBA
La ruta partió desde Los Guindos y, tras pasar por la sede de Unicaja y el Ayuntamiento, finalizó con una ofrenda floral a la patrona de Málaga
La lluvia no logró aguar la fiesta de los aficionados del Unicaja Málaga. El flamante ganador de la Liga de Campeones de Baloncesto celebró por todo lo alto su trofeo, recibiendo el apoyo de los aficionados, que acompañaron al equipo sin descanso durante los diversos actos que tuvieron lugar en la tarde del lunes.
Pese a que la salida del autobús tuvo que retrasarse a causa de la lluvia, la afición acompañó al vehículo descapotable desde su salida del polideportivo Los Guindos hasta su llegada al centro de la ciudad. Durante todo el recorrido, los aficionados malagueños corearon los nombres de sus jugadores y su entrenador, Ibon Navarro, que saludaron y bailaron con los aficionados al ritmo de Campeones, Campeones.
El primer alto en el camino tuvo lugar en la sede de la entidad Unicaja, en la céntrica plaza de la Marina. Desde el balcón del edificio, el equipo ofreció el trofeo a su afición. A continuación, les esperaba el Ayuntamiento. El alcalde de la ciudad, Francisco de la Torre, acompañado de miembros de la Corporación municipal, de la delegada del Gobierno andaluz, Patricia Navarro, y del presidente de la Diputación, Francisco Salado, sólo tuvo palabras de orgullo y elogio para los «héroes de Belgrado».
Desde el balcón del ayuntamiento, de la Torre agradeció el apoyo de la afición malagueña, «que es la mejor afición de basket de España y del mundo», y aprovechó para invitar a malagueños y aficionados a acudir el próximo domingo al Martín Carpena «para darle el calor y el apoyo que la lluvia hoy no nos ha permitido».
El capitán del Unicaja, Alberto Díaz, incapaz de «igualar el ‘speech’ de nuestro alcalde, eso es imposible», agradeció, en nombre de su equipo, el apoyo de Unicaja y del resto de instituciones. «Todos ellos han hecho y han creado con mucho esfuerzo este equipo, que no es nada fácil», confesó, antes de rendirse, por supuesto, a su afición, la ‘marea verde’. «Llenáis el Carpena cada día, nos apoyáis, nos dais mucha fuerza».
«Un grupo increíble»
Después del baño de masas en el balcón, tuvo lugar lugar un pequeño acto en el Salón de los Espejos del Ayuntamiento donde, tanto Salado, como Patricia Navarro, el presidente de la Fundación Unicaja y el presidente del Club, Antonio Jesús López Nieto, alabaron la actuación del equipo campeón, no sólo por su triunfo en Belgrado, sino por lo que representan para la ciudad de Málaga.
Antes de abandonar el Ayuntamiento para seguir con la celebración, Alberto Díaz quiso tomar de nuevo la palabra para «hablar más como malagueño que como capitán o jugador de baloncesto», aprovechando para destacar las cualidades humanas de todos sus compañeros. «El alma de este equipo es eso, es una unión, una familia que hemos creado que es maravillosa», afirmó.
Finalizado el acto, el autobús continuó su ruta festiva hasta llegar al Santuario de la Victoria, patrona de la ciudad de Málaga, donde se realizó una ofrenda floral, el broche de oro a una jornada llena de orgullo, emoción y gratitud.
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