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El Rey, en el Encuentro Empresarial Iberoamericano celebrado en Cuenca (Ecuador)

El Rey, en el Encuentro Empresarial Iberoamericano celebrado en Cuenca (Ecuador)EFE

Casa Real  El Rey urge a «trabajar juntos por el bien común» y a «no olvidar las lecciones de la tragedia» de la DANA

Don Felipe pide desde Ecuador «que instituciones y sociedad actúen al unísono» y advierte: «El tiempo apremia y el clima no perdona»

El Rey ha vuelto a reclamar a las instituciones que «actúen al unísono» y pongan «el foco en la ayuda a los damnificados» por la DANA y «la reconstrucción de las zonas afectadas». «Lo sucedido nos muestra, de la forma más dura y clara, la importancia o incluso la urgencia de trabajar juntos por el bien común».

Este ha sido el primer mensaje que Don Felipe ha transmitido desde Cuenca (Ecuador), donde se celebra la Cumbre Iberoamericana. El Rey ha aprovechado su intervención en el Encuentro Empresarial Iberoamericano para dar las gracias «a tantos países» por la solidaridad, el afecto y el apoyo prestado tras la DANA.

Aprender con humildad

Pero también ha vuelto a insistir -ya en clave nacional- en la importancia de «trabajar juntos» y evitar los enfrentamientos entre instituciones o Administraciones. «Retomaremos nuestro camino de progreso y bienestar -ha manifestado-. Lo haremos con firmeza, constancia y la humildad de aprender y no olvidar las lecciones de esta tragedia».

En su intervención ante los empresarios iberoamericanos, Don Felipe ha trasladado su agradecimiento en nombre de todos los españoles y de la Reina «por todas las muestras de solidaridad, afecto y apoyo que España ha recibido durante estas semanas desde tantos países, particularmente de nuestros hermanos iberoamericanos (aplausos) por los devastadores efectos de las riadas e inundaciones que ha causado esa terrible y extraordinaria depresión atmosférica (la DANA) en numerosas zonas de nuestro país; principalmente en la Comunidad Valenciana, en Castilla-La Mancha y Andalucía».

«El clima no perdona»

El Rey ha recordado que «más de 220 víctimas mortales y una devastación material extrema, sin precedentes cercanos en nuestro país, nos llenan de dolor y nos ponen a prueba». Y ha añadido: «Ha sido un golpe profundo que ha sacudido la vida de miles y miles de personas, poniendo al límite la capacidad de respuesta y planteando un enorme desafío».

Además, Don Felipe ha hecho un llamamiento a preparar y reforzar la capacidad de cada país para afrontar las catástrofes: «El tiempo apremia y el clima no perdona. Tenemos −como humanidad− las herramientas: la ciencia, la ingeniería, la tecnología, la cooperación…, incluso los recursos. Debemos abordar con mayor celeridad y eficacia nuestra preparación −cada país y también en el ámbito multilateral− y reforzar nuestra capacidad de resistencia y superación, ante la gran diversidad de graves riesgos naturales, no sólo climáticos». «Y acá, en este continente lo saben bien», agregó.

Y ha sido entonces cuando ha advertido que «en momentos como este es fundamental que instituciones y sociedad actúen al unísono, poniendo el foco en la ayuda a los damnificados y la reconstrucción de las zonas afectadas». «Lo sucedido nos muestra, de la forma más dura y clara, la importancia o incluso la urgencia de trabajar juntos por el bien común», ha añadido.

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