El antiguo convento, teatro y luego cine que su propietario, Enrique Cerezo, quiere demoler en Talavera

El cine Calderón, como teatro-cine Royalti, fue el primero en Talavera de la Reina en proyectar una película sonora en 1932. Su propietario es el empresario y presidente del Atlético de Madrid, Enrique Cerezo, quien ahora quiere demolerlo.

El Plan Especial de Reforma Interior de Mejora (PERIM) que el propio Cerezo ha promovido es para muchos un atentado contra el patrimonio. El edificio n es Bien de Interés Cultural (BIC), pero está en proceso de serlo. A finales del XVII fue un convento franciscano.

En la Lista Roja de Hispania Nostra

Después los frailes se trasladaron y posteriormente, tras la desamortización, el edificio cayó en el abandono y sus estancias se convirtieron en un pequeño caos de usos: desde almacenes a viviendas hasta su reconversión, primero en teatro y después en cine, el primero sonoro de la ciudad.

Hispania Nostra, asociación por la defensa del patrimonio, lo ha incluido en su Lista Roja del Patrimonio, un lugar que lleva décadas abandonado. La asociación considera que en él «han sucedido relevantes hitos históricos» y pone de manifiesto su valor patrimonial cultural, religioso y arquitectónico.