Manifestación multitudinaria en Barcelona Decenas de miles de personas claman contra la amnistía: «¡Hemos dejado de ser la mayoría silenciosa! ¡Viva España!»
El exalcalde de La Coruña, Francisco Vázquez, denuncia en una aplaudida intervención que se quiera «hacer una Venezuela de España»
La multitudinaria protesta ha congregado a 300.000 personas, según los organizadores. la Guardia Urbana rebaja la cifra a 50.00
«No a la amnistía». Esta consigna ha recorrido cada punto de Paseo de Gracia de Barcelona, que se ha llenado respondiendo a la convocatoria de Sociedad Civil Catalana. Decenas de miles de personas le han dejado claro al presidente del Gobierno que todos «tienen que ser iguales ante la ley», y que los independentistas no pueden gozar de privilegios por un puñado de votos. Han sido ciudadanos que han llegado de diferentes puntos de España y de Cataluña, y que han coreado otros lemas, como «Puigdemont a Prisión» o «Sánchez dimisión». Los organizadores han cifrado en 300.000 el numero de personas que han salido a la calle para protestar, mientras que la Guardia Urbana ha reducido la cifra a 50.000.
El acto ha finalizado en la confluencia entre Gran Via y Paseo de Gracia. Allí han intervenido los responsables de Sociedad Civil Catalana, Alex Ramos y Elda Mata, pero también la catedrática de Derecho Constitucional, Teresa Freixas y el exalcalde de La Coruña, Paco Vázquez. Este último, con su apasionado discurso, ha provocado los aplausos más sonoros. «¡Hemos dejado de ser la mayoría silenciosa!, ¡Viva España y viva el Rey!», ha manifestado el exalcalde de La Coruña.
Seis años después de la gran manifestación que se celebró en Barcelona, también un ocho de octubre, para alzar la voz en contra de las pretensiones de los separatistas de conseguir la independencia de Cataluña, el constitucionalismo ha vuelto a salir a las calles de la capital catalana para pedir al presidente del Gobierno en funciones que no acepte las dos condiciones que le ponen Junts y ERC para conseguir su investidura: la amnistía y la autodeterminación, o lo que es lo mismo, un referéndum de independencia para Cataluña.
Esta ha sido la gran diferencia entre una y otra manifestación. En la de hace seis años, aunque sin demasiado entusiasmo, participaron los socialistas, y en esta última, no. Es más, el líder del PSC ha desdeñado esta convocatoria reduciéndola a un acto de la «derecha y la ultraderecha» para «generar miedo» y también «crispación».
Ha sido una manifestación que se ha desarrollado en tono festivo. Los participantes portaban sobre todo banderas de España y de Cataluña, y también se ha visto alguna de la Unión Europea. Y han llegado desde diferentes puntos del país: Andalucía, Valencia, Madrid, Mallorca o Valencia. Una marcha que se ha hecho más amena gracias a la banda sonora que ha puesto la organización, con canciones de Nino Bravo, como «Libre» o de Joan Manuel Serrat: «Mediterráneo» y «Hoy va a ser un gran día».
El acto ha finalizado en la confluencia entre Gran Via y Paseo de Gracia. Allí han intervenido los responsables de Sociedad Civil Catalana, Alex Ramos y Elda Mata, pero también la catedrática de Derecho Constitucional, Teresa Freixes y el exalcalde de La Coruña, Paco Vázquez. Este último, con su apasionado discurso, ha provocado los aplausos más sonoros. Todas estas intervenciones han acabado con un «Viva España, Viva Cataluña y viva el Rey».
manifestación 8-O en barcelona
Feijóo afirma que la amnistía es «una cacicada impropia de una democracia»
Pero el que más pasiones ha despertado ha sido el dirigente socialista, Paco Vázquez, que ha blandido varias veces un ejemplar de la Constitución, y que ha dejado claro que «nos quieren robar la España de la Constitución y de la Ley». También ha defendido que no hay mejor lugar que Barcelona «para defender España» y ha destacado, ante la multitud que lo vitoreaba, que «ya hemos dejado de ser la mayoría silenciosa, porque vamos a utilizar la palabra y la verdad para defender España y la Constitución».
Manifestación 8-O en Barcelona
Abascal califica la amnistía de «agresión a la Constitución y al pueblo honrado»
Por lo demás, ha denunciado que se quiera «volver a imponer las dos españas, las dos orillas enfrentadas». Y ha recordado que la «amnistía ya nos la dimos, y la autodeterminación nos la dimos al votar la Constitución, aprobada por un 90% en Cataluña. También ha lamentado que se haya llegado a esta situación para que unos, “sigan en el gobierno», y los otros, los independentistas, para seguir avanzando con su propósito de conseguir la independencia de Cataluña. Pero lo que más ha lamentado es que se quiera hacer de España «una Venezuela».
Tampoco se ha librado de las críticas del exalcalde de La Coruña, Sumar: «los comunistas», como así se ha referido a la formación, y que, según ha asegurado, quieren también meter baza para «alterar la forma del Estado y derogar la Constitución».
Le ha precedido en el turno de palabra la catedrática de Derecho Constitucional, Teresa Freixes, quien ha denunciado que la situación «es mucho peor de lo que dicen» y que, tanto desde el gobierno, como los propios independentistas, están subvirtiendo el lenguaje: «llaman generosidad a la amnistía”, ha dicho. También ha asegurado que “esa alianza mal llamada progresista se reforzará la concordia, más bien lo contrario. Convertirá a unos ciudadanos en patriotas y al resto en marginales».
La presidenta de Sociedad Civil Catalana, Elda Mata, ha dejado claro que «no estamos dispuestos a blanquear al nacionalismo», y también que van a defender «sin desfallecer los valores de la democracia. Ni amnistía ni autodeterminación». Así ha acabado su discurso, recordando el lema de la manifestación.
Y como colofón a este acto, se han interpretado el «Cant de la Senyera» (el canto de la Senyera), que no Els Segadors, que es el himno de Cataluña; pero también han sonado los acordes del Himno Nacional, del de la Unión Europea, y finalmente el «Resistiré», del Duo Dinámico. Se ha invitado a todos los asistentes que lo cantaran como ejemplo de la «resistencia», de los que se oponen que los independentistas quieran imponer al resto su modelo político y social.