Cataluña
ERC presiona a Sánchez para que cumpla los acuerdos, mientras que presume de no cumplir los suyos con el PSC
Los republicanos no han movido ni un dedo por el Hard Rock, la B-40 o la ampliación del aeropuerto; y se han saltado el freno para abrir nuevas embajadas
Desde ERC, empezando por el propio presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, insisten en presionar a Pedro Sánchez para que cumpla con el acuerdo entre PSOE y los independentistas, y que permitió su investidura. «Sánchez deberá cumplir sus compromisos y nosotros garantizaremos que lo haga», es la última advertencia que lanzaba Aragonès en una entrevista al Financial Times, aunque ya lo ha hecho en otras ocasiones. De hecho, también ha dejado claro una y otra vez que el futuro de la legislatura española dependerá del cumplimiento de los compromisos precisamente por parte del Gobierno.
Una actitud que contrasta con la que mantienen los republicanos en el Parlament. En la cámara catalana han sacado pecho precisamente por no cumplir sus acuerdos con el PSC, especialmente con relación a la cuestión del Hard Rock, un complejo turístico que se construiría en la Costa Dorada (Tarragona). Esta fue una de las cuestiones que los socialistas incluyeron en las negociaciones para apoyar los presupuestos de la Generalitat de 2023. Pero casi un año después, y cuando ya se piensan en los del 2024, el Govern de ERC no ha movido ni un solo dedo. Y no solo con este tema, sino también otras que los socialistas consideraban prioritarias: la ampliación del aeropuerto del Prat o el llamado cuarto cinturón, la B-40. Pero es que los republicanos tampoco han cumplido con otro punto: paralizar la apertura de nuevas embajadas.
Sin ir más lejos, la consejera de Economía, Natalia Mas Guix, decía esta semana en el Parlament que el proyecto de presupuestos para el 2024 «no incorpora ninguna partida vinculada al proyecto» del Hard Rock. Pero no solo se quedaba ahí y recordaba que las actuales cuentas «tampoco lo incorporaban», porque los proyectos que defienden para Cataluña pasan por la «reindustrialización y la economía de alto valor añadido».
Pero lo cierto es que los socialistas, hace prácticamente un año, hicieron caballo de batalla de este proyecto, era una de las «líneas rojas» que entonces se marcaron. En el acuerdo que firmaron ERC y PSC se contemplaba que durante el primer semestre de esta 2023 se aprobaría la PDU definitiva y se mantendría la disponibilidad de los terrenos. Pero de momento, ni lo uno, ni lo otro.
Luego está el proyecto de la B-40. Precisamente la aceptación por parte de la dirección de ERC de ea ampliación de esta vía hasta Sabadell, suscitó una gran polémica en el seno de la formación. A primeros de julio, la entonces ministra de Transportes, Raquel Sánchez, y la consejera de Territorio, Ester Capella, firmaron los protocolos para construir esta vía. Pero los protocolos son una intención política, más que concreciones, y desde el Govern se hacen los suecos ante un proyecto que les incomoda, y mucho. De ahí que la evolución de las obras es una incógnita.
Y a todo esto, ¿qué dicen en el PSC? De entrada, que no van a negociar unos nuevos presupuestos si no se cumplen los que aún están vigentes. Y desde luego, ERC no ha cumplido ni con el Hard Rock ni con la B-40. La portavoz parlamentaria de los socialistas, Alicia Romero, decían que están «preocupados», porque no se están cumpliendo con estos «proyectos importantes para el país» y que, según su opinión, es «imprescindible que estén finalizados en los términos acordados». Romero hablaba de estos dos proyectos en concreto, pero según los socialistas, solo se habían ejecutado (hasta mediados de octubre) un 16% de las medidas acordadas. El Govern niega la mayor y habla del 96%.
Si tenemos en cuenta esta premisa, y cuando faltan solo un par de semanas para que acabe el año, los republicanos no van a cumplir. Y, se podría deducir, que el PSC no va a apoyar los presupuestos de la Generalitat para el año que viene. Y los socialistas son claves para el devenir de la legislatura en Cataluña, teniendo en cuenta que ERC solo cuenta con 33 diputados de 135 y Junts ha pedido una y otra vez a Aragonès que convoque elecciones, lo que hace prever que no apoyarán las cuentas del 2024. Todo depende, eso sí, de las necesidades del Partido Socialista en el Congreso.
Aeropuerto y embajadas
Pero el Hard Rock y la B-40 son solo dos de los proyectos «fundamentales» para el PSC. Luego está la ampliación dela aeropuerto, o como se dice en el acuerdo, «que El Prat gane capacidad». En este punto, sí que es verdad que los socialistas no se han mostrado tan contundentes en su reclamación. Lo cierto es que en el pacto para los presupuestos de 2023 se contemplaba la creación de una comisión técnica que permitiera abordar el nuevo modelo aeroportuario para Cataluña. Pero no se ha movido nada ni un milímetro. Eso sí, los socialistas tienen una justificación, que es el cambio reciente de ministros.
Y luego está la cuestión de las embajadas. Se ha quedado en papel mojado el punto que decía que la Generalitat pararía en la apertura de nuevas delegaciones en el exterior, y que frenaría su despliegue internacional. Pues bien, este año el Govern ha inaugurado más embajadas y también ha aprobado la creación de un cuerpo diplomático catalán. Hace unas semanas, de hecho, la Generalitat inauguró la delegación de Corea del Sur y el próximo año ha anunciado que le tocará el turno a la de Japón. Y también ha dejado claro la consejera de Acción Exterior y el propio presidente de la Generalitat, que no van a parar ahí.