Otra 'herencia' del gobierno de ERC: 31.000 alumnos de FP no tienen plaza asignada

La nueva consejera de Educación, Esther Niubó, ha recibido una herencia envenenada de su predecesora, la republicana Anna Simó. Y es que se ha conocido que algo más de 31.400 alumnos que habían hecho la preinscripción para estudiar Formación Profesional no tienen aún plaza asignada entre sus primeras diez peticiones. ¿Y esto qué implica? Entre otras cuestiones, que buena parte de los alumnos afectados empiecen el curso quince días más tarde. Lo harán a principios de octubre.

Y es que tienen que esperar a que se cierre la segunda fase de matriculaciones, entre el dos y el seis de septiembre, para optar a la fase extraordinaria de repesca, en la que se repartirán las plazas vacantes. La consejera de Educación ha pedido disculpas por esta situación y ha asegurado que es «una prioridad del Govern reforzar el sistema público de Formación Profesional y nos comprometemos a hacer todo lo que esté en nuestras manos para que el próximo curso no se repitan estas situaciones».

El curso pasado, a mediados de septiembre, se registraron 14.500 plazas libres y unos 1.800 alumnos sin asignación. Y de momento, por ahora, hay casi quince mil estudiantes sin plaza de grado superior y en el caso del grado medio, la cifra asciende a 16.472. Pero como decíamos, estos últimos se deberán esperar a la repesca, el 12 de septiembre, cuando el curso empieza, con todo lo que conlleva para docentes y alumnos.

Y, ante este panorama, profesores y familias están que trinan. Desde el sindicato Comisiones Obreras piden medidas extraordinarias para este mismo curso, sin esperar al siguiente, y que se habilite una partida extraordinaria para ampliar grupos y contratar profesorado para que todos los alumnos que así lo desean puedan acceder a la FP pública.

También consideran «muy grave» que haya estudiantes que no se puedan matricular hasta el 30 de septiembre, cuando el curso ya habrá empezado el día 12. «Este alumnado no podrá asistir al inicio de curso y se perderá los primeros días de clase con las consecuencias que eso tendrá para su proceso de aprendizaje y para su integración en el centro», apuntan desde el sindicato.

Y todo ello, recuerdan, por un calendario «laberíntico y no harmonizado» con el resto de enseñanzas, porque imposibilita un proceso de preinscripción adecuado. Según CCOO, el sistema actual comporta «una complejidad y unas dificultades innecesarias» para las familias, los alumnos y los centros educativos.

¿Cómo es este proceso? Para empezar se ha modificado el sistema de ordenación de solicitudes y matrículas, que se ha hecho basándose en la nota y no en la orden de petición. De esta forma, según el Departamento de Educación, se favorece a los estudiantes que obtengan mejores notas. Con este sistema, solo se ha matriculado el 70 % del alumnado, que son los que obtuvieron plaza en la primera opción elegida. El resto lo hará entre las otras nueve opciones esta semana y tras esta ronda, empezará la repesca extraordinaria.

También desde el ámbito político, Junts ha pedido que se resuelva de «forma inmediata» la situación de estos estudiantes. Y apunten directamente al gobierno de ERC que «arrastró su incompetencia hasta el último minuto». Lo cierto es que el Departamento de Educación ha estado en el ojo del huracán en varias ocasiones estos últimos años, y no solo por intentar apartar al español en los colegios de Cataluña.

Otras polémicas

Así, por ejemplo, los últimos informes Pisa han dejado en evidencia al sistema educativo catalán, que está a la cola de España en los tres ámbitos que se evalúan: matemáticas, lectura y ciencia. Polémica también fue la explicación que se dio a estos desastrosos resultados: la inmigración. La afirmación la hizo el que fuera secretario de Políticas Educativas Ignasi García Plata. Educación tuvo que rectificar.

Y también resultó un caos el proceso para la adjudicación de plazas de personal docente. Tenía que estar acabado a principios de julio, pero se retrasó algo más de dos semanas. Los sindicatos docentes reconocen que había un elevado volumen de personas para colocar, pero consideran que influyó negativamente el decreto de plantillas y el decreto de dirección, normas que permiten a las direcciones de los centros educativos públicos a confeccionar hasta el 51% de la plantilla de profesores a medida. Y esto ha provocado que haya docentes que se les haya adjudicado plaza a mucha distancia de su domicilio, que se les haya asignado una especialidad que no es la suya, o que se les haya adjudicado un centro de alta complejidad, aunque no lo habían solicitado.

Y a todo esto hay que añadir el enfrentamiento que el Departamento ha tenido con profesores por el inicio del curso escolar (que este año se vuelve a retrasar), por ejemplo, o porque los docentes han pedido que se reviertan los recortes en educación en Cataluña.