Joan Soteras, sentado junto al presidente del FC Barcelona, Joan Laporta
Deporte
Una carta envenenada: los clubs afean el optimismo navideño del presidente de la Federación Catalana de Fútbol
Los equipos critican el balance de final de año que hace el actual presidente, Joan Soteras
El presidente de la Federación Catalana de Fútbol (FCF), Joan Soteras, ha enviado una carta felicitando las fiestas a los presidentes y presidentas de los diferentes equipos catalanes. Soteras, que sigue en el cargo a pesar de que las dos elecciones que se celebraron se encuentran en los tribunales y una jueza de Sabadell sigue con la investigación de la manipulación de actas, ha lanzado tres mensajes en su felicitación navideña.
«Uno de los mayores logros que podemos celebrar juntos es el constante aumento del número de equipos y licencias federativas en todas las categorías», se lee en ella, y añade: «La FCF está preparando un paquete de ayudas directas a clubes y federados superiores a los 3 millones de euros (...) [y] la bonificación íntegra de las cuotas de la Seguridad Social de los entrenadores de equipos de jugadores/as menores de 18 años».
A esto debemos añadir que, al final de la carta añade una serie de datos para dar a entender el buen gobierno de la actual Federación. Estos son: «7.008.269 millones de euros de ahorro en cuotas de la Seguridad Social, cálculo con una media de 191,5€; 213 equipos nuevos F11; 153 nuevos equipos futbol femenino; 44 nuevos equipos F7; 9.220 nuevas licencias al inicio de la temporada; 331 nuevos equipos de Fútbol Sala».
La visión de los clubs
El Debate se ha puesto en contacto con varios clubs para conocer su opinión, no sólo de la carta, sino de los datos aportados y si consideran que la labor llevada a cabo por la Federación es satisfactoria. La mayoría se quejan de que la carta no explica un hecho lamentable: el fútbol catalán está pasando por la peor calificación deportiva de su historia. No hay ningún equipo en Segunda División A y sólo uno en la tercera categoría del fútbol nacional.
El club de fútbol Asociación de Exalumnos Maristas de Lérida (AEM) aún espera que la Federación le reconozca 150.000 euros de ayudas ganadas de la temporada 2023-2024. Se quejan que la Federación catalana no los ha ayudado en su reclamación a la Real Federación Española de Fútbol. También comentan que encuentran a faltar que hable de las acciones judiciales que tienen en contra, motivadas por el fraude electoral «más grave de la historia del deporte».
Respecto a los siete millones de euros que se han ahorrado en cuotas de la Seguridad Social, consideran que ha falsificado las cifras. Soteras se atribuye como ahorro propio, explican, la medida de bonificación de la Seguridad Social de los clubs, como consecuencia de la medida fiscal aprobada.
Se ríen de este ahorro, porque la realidad es que ha despedido a la mayoría de los trabajadores que estaban en la Federación. Desde el primer momento Soteras se opuso y, ahora le da la vuelta y convierte este tema en un éxito de la Federación. «Que se lo expliquen a todos aquellos que perdieron su trabajo», concluye uno de los directivos.
Agencia de Protección de Datos
La carta tampoco habla de la Agencia de Protección de Datos, que está investigando la utilización, por parte del equipo de Soteras, de datos personales de los clubs de fútbol. Tampoco de los resultados de los asambleístas, donde no ganaron los equipos vinculados a Soteras.
Se quejan de los altos sueldos que cobran tanto Soteras como José Miguel Calle, director general de la FCF, que impide se hagan más cosas a favor de los clubs de fútbol catalanes. Recordemos que Soteras cobra 120.000 euros netos al año y Calle percibe 150.000 euros anuales. En total, la nómina de la Federación asciende, anualmente, a 6,6 millones de euros.
A todos esto debemos sumar que Soteras ha perdido cuatro querellas que interpuso contra Juanjo Isern; el aplanamiento de la Generalitat de Cataluña a favor de Isern en la demanda del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña; las actas notariales falsas; y un largo etcétera de cosas.
En definitiva, a pesar de los buenos propósitos de la carta, la realidad es que los clubs de fútbol catalanes no están contentos y esperan que se resuelva pronto todos los procesos y haya un cambio en la Federación, con el fin de poner el fútbol catalán en la élite que se merece y dejar de vivir esta época nefasta.
