
Pío IX
Títulos pontificios concedidos a catalanes
Si hablamos de los títulos nobiliarios, existen de dos, o incluso tres, tipos
Si hablamos de los títulos nobiliarios, existen de dos, o incluso tres, tipos. El más normal es el título que concede el rey o reina de cada país a las personalidades de su reino. Luego están los títulos que a uno le puede conceder un rey extranjero. En un momento determinado de la historia de España, tenemos los títulos concedidos por Franco, que a priori no podía concederlos, pero al aprobarse la Ley de Sucesión en la Jefatura del Estado, del 27 de julio de 1947 tuvo esta potestad y luego tenemos los títulos pontificios.
El tema de este artículo son los títulos nobiliarios pontificios. ¿Qué son? Los títulos nobiliarios pontificios o provenientes de la llamada nobleza romana son aquellos otorgados por el papa a varones o mujeres extraordinariamente destacados en el servicio a la Iglesia, a la fe católica o al papado. Desde 1863 a 1951 se concedieron 26 títulos nobiliarios a personalidades catalanas. En total 19 marquesados, 6 condados y 2 baronías.
Pío IX
Marqués de Moragas. Concedido el 1 de febrero de 1876 a María de la Consolación de Moragas y de la Quintana, viuda Joaquín Castañer y José Rufino Vidal Nadal. Le sucedió su hija Consuelo Vidal de Moragas, extinguiéndose con ella.
Marqués de Camps. Concedido el 6 de febrero de 1876 a Pelayo de Camps y de Matas, ingeniero de montes, diputado a Cortes por Gerona y senador del Reino. Fundador y presidente del Instituto Agrícola Catalán de San Isidro.Conde de Vidal. Concedido el 27 de noviembre de 1863 a Buenaventura de Vidal Esteve, camarero secreto de capa y espada del Papa Pío IX, doctor en jurisprudencia, asesor de la Guardia Real, auditor de guerra, consejero real honorario y comisario regio. Falleció en 1892.
Conde de Sicart. Concedido el 1 de octubre de 1875 a Isidro Sicart y de Torrents, sobrino de la marquesa de Villanueva y la Geltrú. En 1899 compró en Vilaseca lo que se conoce como castillo del Conde Sicart.
León XIII
Marqués de Dou. Concedido el 1 de octubre de 1880 a Luis Fernando de Alós y de Martín, miembro de la Real Academia de la Historia y uno de los próceres de la nobleza catalana. Tradicionalista.
Marqués de Olivart. Concedido el 7 de julio de 1882 a Ramón María de Dalmau y de Olivart, jurista experto en Derecho Internacional, escritor y político. También era señor de Gelida.
Marqués de Robert. Concedido el 5 de junio de 1888 a Roberto Robert Surís, aristócrata, financiero, empresario y político. Propietario del Palacio Robert en Paseo de Gracia con Avenida Diagonal. También fue conde de Serra, de Sant Iscle, de Torroella de Montgrí con Grandeza de España.
Marqués de Casa Maury. Concedido el 8 de abril de 1897 a Pedro José Manuel Ricardo Monés Maury, casado con María Luisa de Montalbán. Su hijo, Pedro José Monés de Montalbán, se casó el 20 de octubre de 1937 con Winifred May, socialité inglesa que fue amante del futuro rey Eduardo VIII de Inglaterra, cuando era Príncipe de Gales.
Marqués de Galtero. Concedido el 11 de junio de 1900 a Eduardo de Casanova Galtero, era director del Banco de Barcelona y de la Caja de Ahorros y vocal de las Juntas de Obra de Santa Mónica, del FC de Olot y del Banco Vitalicio. El título se extinguió al no tener descendencia su hijo Guillermo de Casanova y de Valles.
Marqués de Julià. Concedido el 27 de marzo de 1901 a Camilo Julià Vilasendra, era ingeniero industrial y miembro fundador del Banco Popular. Miembro de la Orden del Santo Sepulcro. Se le concedió el título por su buen comportamiento cristiano, por sus muchas obras benéficas y favor de la Iglesia Católica.
Conde de Berenguer. Concedido el 1 de julio de 1879 a María de los Dolores de Llobet Parés, casada con Joaquín de Berenguer y de Camps.
Conde de Olzinelles. Concedido el 25 de mayo de 1883 a Hermenegildo de Olzinelles y de Tos. Fue su único titular. Su hermana, María de la Concepción de Olzinelles y de Tos, se casó con Pelayo de Camps y de Mata, primer marqués de Camps, también pontificio.
Barón de Ferrer. Concedido el 31 de mayo de 1881 a Melchor de Ferrer y de Manresa, compositor de obras corales, sinfónicas, instrumentales, lied, motetes, óperas y obras religiosas. Compuso dos misas de réquiem, dos gloria y un Stabat Mater.
Pío X
Marqués de Pascual-Bofill. Concedido en 1905 a Manuel María Pascual i de Bofarull. El 1 de diciembre de 1917 se utilizó la nueva denominación de Pascual-Bofill a favor de Soledad Pascual y de Llanza, esposa de Ramón Bofill Gallés. Esta nueva denominación se la otorgó el Papa Benedicto XV. Manuel María Pascual era accionista del Banco de Barcelona y uno de los fundadores de la Compañía Madrileña de Teléfonos. Presidió la Junta Diocesana de Acción Católica. Se le concedió el título por su fidelidad a la Santa Sede y protección al catolicismo, además de sus obras de caridad.
Marqués de San Antonio. Concedido el 11 de octubre de 1905 a Narciso Sicars Salvador, doctor en Derecho, escritor, traductor y publicista. Miembro del Consejo de Administración de la Caja de Barcelona. El título se extinguió al no tener descendencia. Tradicionalista.
Marqués de Ferrer-Vidal. Concedido en 1895 a José Antonio Ferrer-Vidal Soler, político y escritor. Se le concedió en reconocimiento a la labor de su padre, José Ferrer Vidal, presidente de la Caja de Barcelona, de la patronal catalana, diputado a las Cortes Españolas, senador del Reino y prohombre de la burguesía catalana.
Conde de Vilardaga. Concedido el 31 de marzo de 1905 a Antonio Clavé Nadal, casado con Carmen Gil Llopart. El título era de carácter personal, sin poderlo heredar sus descendientes. Originario de Sant Feliu de Llobregat.
Barón de Oller. Concedido el 30 de octubre de 1905 a Salvador Oller Padrol, arquitecto municipal en Centelles. Entre sus obras destacan la Casa Oller de Barcelona o la casa Sabaté en Igualada. Murió el 27 de enero de 1907 a los 35 años.
Benedicto XV
Marqués de Muller. Concedido el 1 de julio de 1921 a Francisco Javier de Muller y de Ferrer, viticultor de Tarragona de origen bávaro. Propietarios de las Bodegas De Muller. Su hijo, José María de Muller y de Abadal era doctor en Derecho y presidente de la Diputación de Barcelona.
Marqués de Balanzó. Concedido el 23 de agosto de 1921 a Lorenzo de Balanzó Pons, empresario y escritor. Propietario de la marca Cafés Balanzó.
Marqués de Villota. Concedido el 2 de octubre de 1921 a Isidra Pons Serra, casada con Sebastián Pascual Bofarull. Se le concedió en recuerdo a su abuela Dorotea de Chipitea y de Villota, promotora de las obras de San Juan Bosco en Barcelona. Declarada venerable por el papa Juan Pablo II el 9 de junio de 1983. Vacante o extinguido.
Conde de Sant Llorenç de Munt. Concedido el 15 de julio de 1917 a Antonio Quadras Feliu, hermano del barón de Quadras. Casado con Pilar Feliu García, propietarios de Can Quadras en Calella.
Pío XI
Marqués de Sagnier. Concedido en 1923 a Enrique Sagnier Villavecchia, arquitecto barcelonés, con unos 300 edificios documentados, vinculados a la burguesía catalana y a la iglesia. Entre sus obras destacamos la Aduana puerto Barcelona, Colegio Jesús-María, Palacio de Justicia, iglesia Nuestra Señora de Pompeya o el Templo Expiatorio del Tibidabo.
Pío XII
Marqués de Roviralta de Santa Coltilde. Concedido el 9 de octubre de 1951 a Raúl Roviralta Astoul, médico, filántropo y coleccionista. Hijo del indiano Teodoro Roviralta. Vivía en el Frare Blanc, hoy en día restaurante, en la Avenida del Tibidabo. Además de sus obras benéficas en Barcelona y Lloret de Mar, creó el tónico Glefina, a base de aceite de hígado de bacalao.