Los vecinos del barrio valenciano de Arrancapins claman ante el ruido y la creciente inseguridad

Los vecinos de la calle Maestro Sosa, situada en Valencia, junto a la estación de AVE, están desbordados con los repetidos episodios de inseguridad que se producen en este lugar.

Los afectados están cansados de aguantar una situación que tachan de insostenible y de que no se tomen medidas por parte de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, según denuncian. Reclaman poder vivir en paz, algo que se ha visto afectado debido a la falta de seguridad y el constante barullo. «Estamos cansados de ver gorrillas borrachos», lamenta una de las afectadas a este diario.

Como asegura otro de los residentes del barrio de Arrancapins, el descanso es imposible en esta zona: «No podemos dormir por las noches de todo el jaleo que arman». Además, explica que los bares del barrio no respetan la hora de cierre y que siempre están llenos de gente ebria.

Es un problema que tiene en vilo a todos los vecinos, que denuncian la delincuencia que se vive en estas calles, que además están llenas de basura. Como afirma una de las afectadas, uno de los puntos más conflictivos es el parque del Maestro Sosa. «No podemos llevar a nuestros hijos al parque porque está lleno de porquería y siempre hay extranjeros que van todo el día borrachos», asegura la vecina.

Ante esta situación, se mantienen en constante contacto los diferentes vecinos afectados, para tratar de hacer presión. Aseguran que han llegado al acuerdo de llamar a la mínima a la Policía, para que conste lo que está pasando en estas calles. Aún así, explican estar desamparados por parte de las fuerzas de seguridad y por las instituciones valencianas, como reclama uno de los afectados. «Necesitamos que se nos escuche y se tomen medidas al respecto ya. Esto nos está quitando vida», asevera.

A estos hechos comentados se añaden otros similares, como el reciente asentamiento chabolista, en la calle San Vicente Mártir. Otro caso más que mantiene preocupados a los vecinos afectados por la inseguridad y la falta de tranquilidad.

Se puede observar cómo, por estos casos, está aumentando el número de denuncias vecinales en la ciudad del Turia. «Cada vez más barrios de Valencia se están convirtiendo en zonas inseguras», explica a este periódico uno de los vecinos de Maestro Sosa.

Cabe destacar que el pasado verano, en uno de los constantes episodios tan repetidos en este barrio, la Policía Nacional intervino y arrestó a todos los presentes en el parque. Según atestigua una de las vecinas, eran de origen extranjero y finalmente acabaron deportándolos a su país.

Los vecinos del barrio continúan unidos en esta desesperante lucha para conseguir volver a la tranquilidad que tenían hace unos años. Como señala uno de los afectados a El Debate, van a utilizar la insistencia a la Policía, ya que piensan que es la única forma de que se lleve a cabo una solución.